Nuevas movilizaciones contra la reconversión naval en Gijón
Trabajadores de los astilleros de la bahía de Gijón protagonizaron ayer nuevas movilizaciones contra la reconversión del sector, mediante la colocación de barricadas en varios puntos de la ciudad, cortes de tráfico y enfrentamientos con la policía. Paralelamente, ayer prosiguieron, por separado, las gestiones del delegado del Gobierno en Asturias, el consejero regional de Industria y los sindicatos, para buscar alguna salida al grave clima, de incertidumbre y conflictividad que atraviesa Gijón.Las tensiones laborales están más radicalizadas desde que los empresarios anunciaron, la pasada semana, su rechazo a la resolución del Ministerio de Industria, que proponía la fusión de los tres astilleros privados -Marítima del Musel, Dique Duro Felguera y Cantábrico y Riera- en una nueva empresa, Naval Gijón, con una plantilla definitiva de 975 trabajadores. Sin embargo, representantes de la patronal estiman que este nuevo astillero debe tener una plantilla máxima de 501 empleados y argumentan que tampoco está clara en la resolución de Industria qué aportación correspondería realizar a los empresarios en la constitución de Naval Gijón, cuya financiación está cifrada globalmente en unos 14.000 millones de pesetas.
Entre tanto, CC OO propuso ayer una nueva alternativa para evitar "excedentes traumáticos" en los astilleros gijoneses: crear un astillero con dos divisiones, una para desguace y reparación de barcos y otra para construcción de buques. El sindicato propuso también que se vuelva a constituir una mesa negociadora en la que estén representados la Administración regional, los sindicatos y los empresarios.
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