Parlamentarias de toda España estudian las discriminaciones legales de la mujer

Los avances operados en la legislación española a raíz de la Constitución de 1978 no impiden que la mujer continúe discriminada con respecto al hombre. Ésta es la conclusión principal a la que llegaron ayer un centenar de diputadas, senadoras, diversos altos cargos y dirigentes políticas reunidas en el Congreso de los Diputados, en la primera de las jornadas sobre la actividad parlamentaria en torno a los problemas de la mujer organizadas por la Cámara baja.

Gregorio Peces-Barba, presidente del Congreso, dio la bienvenida a las asistentes a las jornadas, entre las que se apreció una especial afluencia de mujeres de Alianza Popular y del Partido Demócrata Popular. La presencia de diputados varones no sobrepasó en esta primera jornada la decena. Peces-Barba afirmó que el feminismo "era una idea a superar", al considerar que debe tenderse a la igualdad del género humano, la igualdad entre hombres y mujeres.El vicepresidente cuarto del Congreso, el centrista José Miguel Bravo de Laguna, aportó una serie de cifras sobre la presencia porcentual de la mujer en los diferentes parlamentos. La representación en las Cortes Generales es de un 6,36%, cifra equiparable a la del resto de los países europeos, a excepción de Suecia, que alza la estadística hasta un 28,9%. El defensor del pueblo, Joaquín Ruiz-Giménez, ofreció su colaboración a las congregadas.

Los socialistas Carlos Bru Purón y María Dolores Pelayo y el portavoz adjunto del Grupo Popular, Modesto Fraile, expusieron el marco jurídico general en lo que atañe a la mujer. Carlos Bru afirmó la existencia de vestigios discriminadores y hasta alguno inconstitucional en el derecho civil. Así, se habla en ese código de la "supeditación de la vecindad civil de la mujer casada a la del marido". Especialmente criticada fue la nula sanción por el incumplimiento en el pago de pensiones por separación.

Cambios muy lentos

En el posterior debate, todas las intervinientes coincidieron en afirmar que incluso en las modificaciones jurídicas habidas no se podía hablar de eficacia, dado que "los cambios tardan mucho en calar en los jueces", según palabras de la abogada Purificación Gutiérrez, para quien la práctica judicial "es desalentadora".

En el Código Penal, las discriminaciones son aún más lacerantes, al decir de los ponentes Carlos López Riaño y Francisco Granado Calero, del Grupo Socialista, César Huidobro, del Grupo Popular, y Josep Maria Trías de Bes, de Minoría Catalana. El actual Código Penal, cuya modificación aún no ha comenzado, levanta un "colosal monumento al machismo", según palabras de Trías de Bes. En el mismo se castiga igualmente el delito de aborto que el infanticidio y se reiteran conceptos, como el de la buena fama y la honra, anclados en la Edad Media, a decir del socialista Carlos Bru.