El Español paga parte de su deuda para frenar la demanda del Hipotecario

El Español pagó ayer una pequeña parte de la deuda, ya vencida, que tiene pendiente con el Banco Hipotecario desde que esta entidad le prestó 257 millones de pesetas para remozar el estadio de Sarriá con ocasión del último Mundial de fútbol. El club debe todavía unos 80 millones. Lo abonado corresponde a una parte de los dos plazos incumplidos respecto al acuerdo particular que firmó con el banco. El Español, que padece una grave crisis económica, espera poder abonar el resto de estos dos plazos el próximo lunes gracias a la importante recaudación prevista en el partido del domingo frente al Barcelona. La directiva decidió ingresar ese anticipo al conocer la demanda judicial que había puesto en marcha el Banco Hipotecario.

Hacia la solución pactada

El Español pagó ayer una parte de su deuda, aunque, según un portavoz, no había recibido ninguna notificación oficial sobre el exhorto de la demanda judicial del Banco Hipotecario instando al abono o, en su lugar, a la ejecución del bien hipotecado, que en este caso es Sarriá, ya que figura como garantía del préstamo.Presumiblemente, el procedimiento judicial quedará ahora anulado, aunque el club deberá hacerse cargo de sus costos. Este tipo de trámite judicial nunca ha llegado a ejecutarse en las deudas de los equipos de fútbol, pues el Banco Hipotecario ha intentado siempre llegar a una solución pactada antes de aplicar medidas extremas. Por otra parte, los clubes tampoco se niegan a reconocer las deudas y acaban proponiendo nuevas fórmulas de demora para el pago. De todas maneras, en este caso la demanda se planteó en un juzgado de Madrid y ahora debía actuar el de primera instancia número 2 de Barcelona.

El Español está atravesando una grave situación económica, acentuada por las flojas recaudaciones conseguidas en lo que va de temporada. En estos momentos se está procediendo a la renovación semestral de los carnés de socios y las perspectivas son negativas. El Español contaba a finales de diciembre con unos 16.000 afiliados una cifra lejana a la récord a lo largo de su historia, 18.000, y muy inferior a la de 25.000 que se marcó como objetivo Antonio Baró al asumir su presidencia. Actualmente, no han renovado sus carnés unos 3.800 asociados, aunque algunas fuentes del club expresan la impresión de que, "si logramos un buen resultado ante el Barcelona, aumentará la renovación".