Funcionarios de Carabanchel acuerdan apoyar a un compañero sancionado
Los funcionarios de la cárcel de Carabanchel acordaron, en asamblea celebrada en la tarde del pasado viernes, prestar ayuda económica a un compañero suyo suspendido provisionalmente de empleo y sueldo tras la reciente muerte de un recluso nigeriano en dicho centro penitenciario.
El funcionario sancionado por la Dirección General de Instituciones Penitenciarias estaba de servicio en la séptima galería cuando, en la madrugada del pasado día 1, falleció Obiorah. Amechi Emedo. La muerte del recluso nigeriano provocó la airada protesta de una veintena de internos de la misma nacionalidad, que estimaban que los funcionarios no habían atendido la llamada de socorro que se les hizo desde la celda del fallecido cuando éste comenzó a presentar síntomas de encontrarse gravemente enfermo.La asamblea celebrada en la tarde del. viernes por los funcionarios de Carabanchel había sido convocada por UGT y CC OO, según informa Efe, y en la misma se decidió crear una comisión encargada de recaudar fondos destinados a atender la situación económica de su compañero expedientado. Los reunidos denunciaron asimismo la escasez de personal que, en su opinión, padece el centro penitenciario de Carabanchel y que se agrava durante los servicios nocturnos, en los que un funcionario ha de atender a una población reclusa de 480 presos. A juicio de los funcionarios, ello les impide atender con urgencia las llamadas de los internos.
El deficiente estado de muchas de las dependencias de Carabanchel fue puesto de relieve por los asambleístas, que las calificaron de "totalmente inadecuadas para ser habitadas" y resaltaron "el lamentable estado de higiene en que se encuentran las celdas de período".
Otras de las medidas acordadas en la asamblea fue la de cumplir al pie de la letra la legislación vigente en materia de régimen interior. En ese sentido, se acordó que el puesto de trabajo sólo podrá abandonarse previa orden escrita firmada por el jefe de servicios. En relación al turno de noche, la asamblea acordó que, en su transcurso, los funcionarios sólo abrirán las celdas en presencia del jefe de servicios.
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