El ministro del Interior traslada a los gobernadores civiles el control de las condecoraciones policiales

El ministro del Interior, José Barrionuevo, ha cursado instrucciones a los gobernadores civiles para que en adelante ejerzan el máximo control sobre las propuestas de felicitación pública o condecoración a miembros de los cuerpos y fuerzas de la seguridad del Estado. Con ello se pretende evitar que se produzcan nuevos escándalos en la concesión de medallas o felicitaciones, como ocurrió recientemente con guardias civiles y funcionarios policiales procesados por supuestos delitos de tortura.

El control de las condecoraciones o felicitaciones públicas las ejercían hasta hace unas semanas el propio ministro o el subsecretario del departamento, aunque de forma teórica, si bien en la práctica correspondía a los directores generales de la Policía, Rafael del Río, y de la Guardia Civil, José Antonio Sáenz de Santa María.En los últimos meses, en ambos colectivos se han producido anomalías en las concesiones, hasta el punto de que la Dirección General de la Guardia Civil condecoró el pasado 12 de octubre a varios agentes procesados por la justicia por el supuesto delito de malos tratos a detenidos vascos.

Lo mismo ocurrió recientemente en la Dirección General de la Policía, que concedió felicitaciones públicas a los inspectores Amador Miralpeix del Pino y José Manuel Ortiz, procesados como supuestos autores de las lesiones recibidas por el policía nacional José Manuel Castán, quien falleció a consecuencia de las mismas el 14 de marzo del año pasado.

El control de los gobernadores civiles sobre las propuestas de condecoraciones y felicitaciones públicas supone un avance importante para el Ministerio del Interior, que ha conseguido, además de descentralizar el trabajo, atraer en la práctica este tipo de competencias hacia el equipo político del departamento.

Hasta hace muy pocas semanas, los altos cargos del Ministerio del Interior se limitaban exclusivamente a dar salida, con su firma, a unas propuestas que venían ya gestadas desde los diferentes colectivos corporativos.

Numerosas propuestas

En la mayoría de las ocasiones, y dado el continuo número de propuestas que se presentan, los mandos del ministerio se limitaban a firmar lo que ya les hacían llegar como hecho las Direcciones Generales de la Guardia Civil y de la Policía.Esto fue lo que ocurrió el pasado 12 de octubre con las condecoraciones a los guardias civiles procesados por supuestos delitos de torturas, cuya orden fue publicadaen el Boletín Oficial del Estado con la firma del subsecretario del Interior, Rafael Vera, sin que éste en aquel momento supiera a quiénes se condecoraba, ni que los guardias civiles se encontraban sometidos a procedimiento judicial

Mayor control

La decisión de trasladar esta competencia a los gobernadores civiles refuerza el papel de éstos sobre el control de los Cuerpos y Fuerzas de la Seguridad del Estado. La medida no ha sido acogida muy favorablemente en ambos colectivos, especialmente en la Dirección General de la Policía, aunque se espera desde medios oficiales que con ella se eviten posibles sorpresas o malentendidos, como los de los últimos meses, "que han deteriorado la imagen del ministerio hacia el exterior", informó una fuente gubernamental.