Muerto a tiros el propietario de un bar de Bermeo

Miguel Castellanos Escamilla, propietario del bar Guriaga de Bermeo (Vizcaya), murió anoche después de que dos jóvenes, que acababan de penetrar en el local, le hicieran dos disparos a bocajarro con una pistola, delante de la esposa y los hijos de la víctima.Los dos autores del crimen penetraron en el bar, situado en el número 28 de de la calle Inchausti, cuando en el establecimiento se encontraban sólo Castellanos y su familia. Uno de los individuos, de unos 30 años, de 1.70 de estatura, complexión normal, el pelo rubio y rizado, realizó dos disparos con una pistola, que hicieron impacto en la mandíbula y en el pómulo derecho de la víctima. El agresor y su acompañante, un joven de unos 28 años, escaparon presumiblemente en un coche que les esperaba en el exterior.

El herido fue trasladado en una ambulancia de la Cruz Roja de Bermeo a la Residencia Sanitaria de Cruces, en Baracaldo, donde ingresó cadáver.

El crimen se produjo sobre las 19.30 horas. En el lugar de los hechos se encontraron dos casquillos de bala de nueve milímetros Parabellum, munición usada habitualmente por ETA.

Fuerzas de la Guardia Civil montaron controles de vigilancia en Bermeo y zonas próximas, desde minutos después de producirse el asesinato.

Castellanos, de 47 años de edad, estaba casado y tenía 4 hijos. Era natural de Santa Coloma de Gramanet (Barcelona), y residía en Bermeo desde hacía diez años.