España aportará sólo el 0,6% de las compras de acero de EE UU
La exportación española de acero a Estados Unidos -en productos terminados- queda fijada en una participación del 0,67% del total del mercado, de acuerdo con el compromiso logrado por la Administración Reagan con los principales países exportadores de productos siderúrgicos a EE UU."La medida mantendrá casi los niveles de exportación española logrados en el pasado, pero es restrictiva cara al futuro", comentaron medios diplomáticos españoles.
La Administración Reagan, que anunció el acuerdo en la jornada del pasado miércoles, no valora los acuerdos como "proteccionista", sino como una necesidad impuesta para preservar los intereses de las industrias siderúrgicas norteamericanas. Los acuerdos de "autolimitación voluntaria" serán válidos para cinco años, excepto en el caso de Japón, que será bianual, y equivalen a los siguientes países y porcentajes de participación: Japón (5,8%), Corea del Sur (1,9%), Brasil (0,8%), México (0,3%), España (0,67%), Australia (0,18%) y África del Sur (0,42%). Los; acuerdos de autolimitación son análogos a los formalizados en 1982 entre Estados Unidos y el Mercado Común.
EE UU se ha basado en las estadísticas de exportación de 1981, 1982 y 1983 para calcular los nuevos porcentajes, lo que ha perjudicado España, ya que en 1984, en los nueve primeros meses, la exportación española a EE UU tuvo un considerable incremento (1.237.000 toneladas) frente a las realizadas en 1983 (586.000 toneladas), 1982 (513.000 toneladas) y 1981 (688.000 toneladas).
Para el futuro, la cifra de cupo para España será de 677.616 toneladas (0,67%. del mercado), quedando todavía por decidir el reparto de puntos por parte de España. Queda también por determinar el cupo para productos siderúrgicos semiterminados, y se excluyen del acuerdo los aceros especiales, regidos desde la pasada primavera por otro sistema de cuotas.
El sector siderúrgico, que representa la principal partida de exportación española a Estados Unidos, experimentó un notable incremento en los últimos años, gracias a la mayor competitividad de los exportadores españoles y al factor de la depreciación de la peseta frente al dólar.
Hecho similar al experimentado entre otros países exportadores de acero a Estados Unidos que, acompañado a la pérdida de competitividad de las empresas norteamericanas, motivó la promesa electoral del presidente Ronald Reagan de poner restricciones a las importaciones siderúrgicas en Estados Unidos. Es la primera decisión de gran importancia comercial que toma el presidente Ronald Reagan después de su triunfal reelección del pasado 6 de noviembre.
