La campaña electoral en la India entra en la recta final

ENVIADO ESPECIAL, La campaña electoral para los primeros comicios tras el asesinato de Indira Gandhi ha entrado en su recta final, mientras los 200.000 habitantes de Bhopal comienzan a regresar a sus hogares después de la ola de pánico que sacudió a la ciudad la pasada semana ante el temor de un segundo escape del gas tóxico coincidiendo con su transformación en pesticida.

Las elecciones generales en la democracia más poblada del mundo se celebrarán a partir del 24 de diciembre y a lo largo de tres días, el 27 y el 28, además del 24, en 20 Estados y 9 territorios. En sólo dos Estados, Punjab y Assam, las elecciones han sido aplazadas hasta 1985, en el primero debido a la tensión con la población sij y en el segundo como consecuencia de los disturbios de la pasada primavera a causa de la confección de los censos electorales, disturbios que produjeron centenares de muertos.En litigio están dos cuestiones fundamentales para el futuro del país. La primera, la propia supervivencia e integridad de la India como nación tras el asesinato de su líder indiscutible, la primera ministra, Indira Gandhi, el pasado 31 de octubre. La segunda, y plenamente ligada a la primera, la consagración de la dinastía Nehru en su tercera generación en la persona del nieto del primer ministro de la India tras su independendia, Jawaharlal Nehru, e hijo de Indira, Rajiv Gandhi.

Rajiv Gandhi, un antiguo piloto de la compañía Indian Airlines interesado en ordenadores, y que fue obligado por su madre a dedicarse a la política tras la muerte de su hermano Sanjay, recorrió ayer los distritos electorales de Bengala Occidental, dominada por el partido comunista prosoviético desde 1977, para repetir el mismo tema que se ha convertido en el lema principal de su campaña electoral desde el comienzo de la misma a primeros de diciembre. Sólo el Partido del Congreso (1) puede garantizar a la India la unidad, la democracia y el socialismo.

Desintegración

El primer ministro, que a pesar de su bisoñez en política ha sorprendido a propios y a extraños por la firmeza de sus convicciones y de su carácter disimulado todo ello en una forma de hablar pausada y lenta, ha lanzado repetidamente el espectro de la desintegración de la India como arma política contra sus oponentes. La mano extranjera y la conspiración del exterior han sido dos argumentos repetidamente utilizados por el jefe del Gobierno, que cuenta 40 años de edad, para intentar demostrar al electorado que sólo el Partido del Congreso (I), que ha gobernado ininterrumpidamente en la India desde la independencia, con la sola excepción del período de 1977 a 1980, puede garantizar la estabilidad política necesaria para mantener la unidad de un país de más de 700 millones de habitantes, que constituye un mosaico de razas, religiones e idiomas unidos, como irónicamente comenta un periodista occidental, por su afición al criquet y por el idioma de Shakespeare.La oposición, que no ha logrado formar un frente unido como el conseguido en 1977 y que consiguió derrotar a Indira Gandhi, ha tenido que contestar con afirmaciones patrióticas, acusando al actual primer ministro de pretender personificar el patriotismo de la India.

El espectro de un velado apoyo paquistaní a la causa de un Jalistán independiente para los sijs y,por deducción, el fantasma del eje o comunidad de intereses entre Islamabad, Pekín y Washington ha planeado en toda la campaña electoral india hasta tal punto que Rajiv Gandhi, presionado por los periodistas para que revelara a qué mano o conspiración exterior se refería, tuvo que limitarse a manifestar que se trataba más de "intereses que vivían en países extranjeros que a esos países extranjeros", en una clara referencia a las comunidades sijs en el Reino Unido, Estados Unidos y Canadá.

El tema de la conspiración en el asesinato de Indira ha recibido un nuevo impulso con la publicación ayer por la Prensa india de una nota manuscrita de la primera ministra, en la que apunta a la posibilidad de que algunas fuerzas estuvieran tramando su asesinato. La nota manuscrita, encontrada entre sus papeles personales poco después de su muerte, dice textualmente, entre otras cosas: "Si muero violentamente, como algunos temen y unos pocos están tramando...", para terminar con una afirmación de fe en el futuro de la India: "No puedo entender cómo se puede ser indio y no estar orgullo so de ello". Entretanto, la operación fe, des tinada a neutralizar las 15 toneladas del gas tóxico metilisocianato que quedaban almacenadas en la fábrica de la Union Carbide en Bhopal, puede quedar terminada hoy, un día antes de lo esperado.