_
_
_
_

El Grupo Popular amenaza con pedir al Tribunal Constitucional la anulación de los presupuestos de Justicia

Los aspectos más destacados que se produjeron ayer en el debate del Pleno del Congreso sobre el proyecto de ley de Presupuestos del Estado para 1985 se centraron en la amenaza de pedir al Tribunal Constitucional la anulación de los presupuestos del Ministerio de Justicia, realizada por el Grupo Popular, y la defensa del carácter democrático de los comunistas españoles por parte del ministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, en respuesta a determinadas alusiones del diputado conservador Pedro Schwartz.

José María Ruiz Gallardón, por el Grupo Popular, defendió las enmiendas de su grupo a la sección 13 (presupuestos del Ministerio de Justicia) del proyecto de ley. Pidió, por una parte, que se incrementaran los presupuestos del citado ministerio hasta 108.510 millones de pesetas -20.000 millones más de los previstos- y acusó por otra al ministro de Justicia, ausente, de remitir unos presupuestos que no cuentan con el preceptivo informe del Consejo General del Poder Judicial.Los socialistas recordaron al Grupo Popular que este año no habían presentado ninguna enmienda en los presupuestos al Consejo General del Poder Judicial. El debate se encrespó, y Ruiz Gallardón afirmó que el acto de aprobación de la sección 13 era nulo de pleno derecho y que la última palabra no la tendrían los millones de votos o la mayoría de diputados, sino el Tribunal Constitucional.

A continuación el diputado conservador José Ramón Lasuén defendió, infructuosamente, una enmienda de su grupo a la totalidad de la sección 12 (Asuntos Exteriores). Dijo que los servicios exteriores sufren una degradación permanente, que el presupuesto es continuista y que tal continuismo procede de los tiempos de la dictadura de Primo de Rivera.

Indicó asimismo Lasuén que el presupuesto de Exteriores no garantiza la protección y promoción de los ciudadanos e intereses españoles en el extranjero. Dijo que hay que revisar las prioridades, y que no es lógico que casi un 25% de los fondos exteriores se dirijan a Latinoamérica mientras se desatienden otras zonas, como África, con mayor interés económico para España. Afirmó también que los éxitos del Gobierno en política exterior consisten en convencer a los países occidentales de que son los socialistas más moderados de Europa y hacer todo lo posible por ayudar al capitalismo internacional a instalarse en España.

El Pleno debatió posteriormente la sección 15 (Economía y Hacienda). El diputado conservador Pedro Schwartz aprovechó la defensa de sus enmiendas para repetir que los escasos éxitos de la política económica, exportaciones y crecimiento económico, son coyunturales y se deben a que el PSOE no ha cumplido su programa electoral. Le dijo a Boyer que era el menos malo de los ministros socialistas posibles para Economía y Hacienda, pero le recordó que no cumplen la promesa de creación de 800.000 puestos de trabajo. Asimismo, le acusó de no abordar reformas estructurales imprescindibles del sistema económico. El ministro Boyer no contestó a ninguno de estos argumentos y sólo tomó la palabra para defender el comportamiento democrático de los comunistas españoles, ante el silencio de Santiago Carrillo, tras unas alusiones de Schwartz al autoritarismo antidemocrático del PSOE por tener ex comunistas en sus filas.

El debate terminó con la aprobación de los presupuestos de Educación y Ciencia, tras una detallada intervención del ministro de ese área, José María Maravall, para rechazar las acusaciones de disminución de dotaciones a la enseñanza realizadas por el diputado conservador Francisco Soler Valero.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Previamente se produjo un incidente entre el diputado socialista Victorino Mayoral y Soler Valero. Mayoral reconoció, inocentemente, que no había contestado a los argumentos expuestos por Soler Valero en su primera intervención, y que lo iba a hacer cuando éste ya había agotado su dos turnos reglamentarios de palabra y no podía volver a replicarle. El conservador Miguel Herrero pidió entonces otro turno de intervención para el Grupo Popular, amenazando con ausentar a sus diputados.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_