El Prado abre la temporada de exposiciones con obras de Leonardo da Vinci y Rafael
El calendario inmediato de actividades del Museo del Prado incluye dos grandes exposiciones dedicadas a Leonardo da Vinci y a Rafael. La pintura napolitana del siglo XVII y las obras más importantes de Carreño, Ricci y Herrero El Mozo completan el programa de exposiciones previsto para el próximo año, según informan los responsables de la pinacoteca. Junto a los fondos permanentes del museo podrán verse próximamente las nuevas adquisiciones y donaciones.
El calendario de exposiciones monográficas se inicia el próximo día 10 de diciembre con El códice Hammer de Leonardo, donde se incluyen los estudios realizados por Leonardo sobre la naturaleza en los que se pueden apreciar sus conocimientos científicos junto a su habilidad artística. La exposición será enriquecida por la presencia de un manuscrito de Leonardo da Vinci, propiedad de la Biblioteca Nacional, que hasta ahora no ha sido mostrado al público.Durante la segunda mitad del mes de febrero del próximo año está prevista la inauguración de la exposición titulada Rafael en España.
Junto a las obras que son propiedad del museo se incluye un detallado estudio técnico de las mismas, así como copias de las obras del artista que se encuentran en España.
Pintura napolitana
Alrededor de. 100 obras de pintura napolitana del siglo XVII se expondrán durante el mes de abril. Se incluyen trabajes de artistas como Caravaggio y Lucas Giordano junto a obras procedentes de museos y colecciones españolas e italianas.Finalmente, el programa concluye con una muestra dedicada a tres artistas de la segunda mitad del siglo XVII, fallecidos los tres en 1685: Carreño, Ricci y Herrera El Mozo. Se trata de la primera oportunidad de apreciar el conjunto de la obra de estos tres creadores, ya que sus cuadros se encuentran dispersos en museos, iglesias y colecciones privadas.
La conmemoración del cuarto centenario del monasterio de El Escorial no ha sido excluida de este programa de exposiciones. Para conmemorar el carácter de monumento internacional del monasterio, el Prado editará una publicación en la que se detallen los fondos de pintura procedentes del monasterio.
Dentro del mismo museo se marcará un itinerario a través del cual el público podrá conocer las obras que sirvieron para adornar las paredes de El Escorial.
Respecto a la colección de la pinacoteca, ésta se ha visto incrementada con las últimas compras y donaciones. Detro de las donaciones destacan tres obras procedentes del marqués de Casa Torres, recientemente fallecido, quien ya en vida dispuso la donación de Cabeza de venado, de Velázquez, y el Retrato de Floridablanca y Retrato del cardenal Luis de Borbón, ambas de Goya.
Entre las compras realizadas para este museo en 1984 se encuentran obras como Musa calmando la tempestad, de Miguel Carbonell; Cristo en casa de Marta y María, de Joachini Betickelaer; Paisaje, de Ramón Martí Alsina; Condenados por la Inquisición, de Eugenio Lucas; Retrato femenino, de Francis Cotes; Retrato de Maximino Martínez de la Pedrosa, de Eduardo Rosales; Manada de toros, de Genaro Pérez Villaamil; Felicitación de cumpleaños, de Raimundo de Madrazo; Descendimiento, de Juan Correa de Vivar; San Francisco recibiendo los estigmas, de Oracio Borggiani, y Flagelación de Cristo, de Francesco Mazzuchefli.
A la posibilidad de contemplar todas estas obras hay que añadir las piezas recientemente restauradas.
Entre éstas cabe mencionar la tabla de Tiziano La Virgen con Santa Catalina y San Hugo; el Baltasar Carlos, cazador, de Velázquez, y el San Jerónimo, de Murillo, devuelto al Prado en 1982 en un notable estado de deterioro.
