Un ciudadano soviético se refugia en España para buscar asilo político
Andrei Yurevich Solomin, ciudadano soviético y periodista del Priazovskie Stepi de la ciudad de Yeisk (territorio de Krasnodar), abandonó recientemente la URSS y se encuentra en Madrid como refugiado, esperando que Estados Unidos, el Reino Unido o la República Federal de Alemania le concedan el asilo político. La Cruz Roja se encarga de los trámites y de su manutención en España hasta el próximo día 18 de diciembre, fecha tope de la carta de refugiado concedida por la Dirección General de la Policía.
Solomin, de 21 años, se encuentra en España desde el pasado día 10 de octubre. Anteriormente perdió su trabajo como periodista y fue incorporado como mecánico a la plantilla del Nina Onilova, pesquero soviético con 82 tripulantes, que en aquellos momentos se encontraba en el puerto de Las Palmas. El Estado soviético le pagó el viaje a Las Palmas desde Moscú con escalas en Nüremberg y Madrid, para incorporarse a su barco.Una vez en Canarias, permaneció dos días a bordo del Nina Onilova, de la compañía mixta hispano-rusa Sovhispan. A las seis de la mañana del 13 de octubre, aprovechando que sus compañeros dormían y que tan sólo uno de ellos estaba de guardia, abandonó el barco sin permiso y sin efectos personales. Esa misma mañana se presentó en la comisaría de Policía de Las Palmas, expresando su deseo de quedarse en España y de comunicarse con el cónsul norteamericano de la ciudad.
Solomin justificó su decisión en la imposibilidad de efectuar su trabajo periodístico libremente. En la comisaría permaneció tres días, alojado en una celda abierta. El 16 de octubre fue trasladado en avión a Madrid. Dos policías le recogieron en el aeropuerto de Barajas y le trasladaron a la Cruz Roja.
"El 5 de noviembre próximo, el informe elaborado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre mi caso será recibido por la Cruz Roja", según declaró ayer Andrei Solomin, quien añadió que "ese mismo día sabré si Estados Unidos, el Reino Unido o la República Federal de Alemania me conceden el asilo".
Solomin, nacido el 5 de marzo de 1963 en la ciudad de Yeisk, realizó su servicio militar en Sebastopol, en la Marina soviética. Nunca ha militado en el Partido Comunista de la URSS. Critica la invasión de Afganistán por las tropas soviéticas y recuerda a amigos suyos muertos en esta guerra olvidada. No teme represalias por parte de las autoridades soviéticas sobre sus familiares que residen en Yeisk.
La Cruz Roja se ha encargado por el momento de buscarle alojamiento en un hostal madrileño, de su manutención y vestido, además de costearle gastos de bolsillo por valor dede 5.000 pesetas.
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