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La reconversión de los astilleros públicos

Los restos de un naufragio

CARLOS GÓMEZ MadridEl plan de reconversión naval destruye 17.000 empleos y reduce la producción a la mitad

Los trabajadores de la construcción naval serán informados oficialmente, a partir de mañana, del reparto entre los distintos astilleros y centros laborales de los aproximadamente 17.000 puestos excedentarios que, según los planes de reconversión aprobados por el Gobierno para el sector, deberán eliminarse en los próximos meses. Más de la mitad del excedente laboral fijado (9.285 puestos) corresponden a los astilleros propiedad del Estado, siendo las instalaciones de El Ferrol (3.489 excedentes) y Olaveaga (2.261 excedentes) las más afectadas.

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Los planes de reconvención de los grandes astilleros públicos, que suponen la eliminación del 37% de sus plantillas y la reducción de la capacidad productiva al 50% de la actualmente instalada, serán dados a conocer oficialmente, a partir de mañana, a los comités de empresa de los distintos centros de trabajo de Astilleros Españoles (AESA) y Astilleros y Talleres del Noroeste (Astano).La distribución de los excedentes de capacidad productiva y de plantilla entre los distintas centros de trabajo afecta fundamentalmente a las instalaciones de El Ferrol, en Galicia, y Olaveaga, en Euskadi, que dejarán de construir barcos. Los planes de reconversión suponen también la segregación de actividades integradas hoy en Astano y AESA, la potenciación de la reparación de buques y la diversificación de productos.

En líneas generales, el plan de reestructuración 1984-1986 pretende recuperar para nuestros astilleros parte de la competividad perdida, mejorar el ratio de valor añadido neto por buque, introducir la robotización en la construcción naval, diversificar la producción y mejorar la productividad. El plan afecta a las dos grandes empresas públicas: Astano y AESA.

El plan de AESA cifra como objetivo de producción de nuevos buques, para finales de 1986, 255.000 toneladas de registro bruto compensado (la mitad de la capacidad actual) y reduce: la plantilla en 4.810 puestos de trabajo sobre los 16.523 con que contaba a finales de 1983. No obstante, según la empresa, el excedente laboral neto se reduce a 1.610 trabajadores, ya que 3.200 puestos se eliminarán mediante jubilaciones reglamentarias o anticipadas (personas con 55 o más años).

A los centros de Vizcaya (Olaveaga, Sestao y Asúa) corresponde el mayor número de excedentes laborales (3.416 puestos de trabajo), seguidos por los de Cádiz y Puerto Real con 1. 180 excedentes. Por actividades, el grueso de las bajas laborales previstas corresponde a nuevas construcciones de buques (2.150), fábricas de motores (1.097), otras actividades (1.093) y reparaciones (537).

Las previsiones comerciales han fijado para AESA una contratación de cinco buques en 1984 y de 20 buques para 1985, lo que supone una carga de trabajo anual de 4,20 millones de horas en 1984, 5,71 millones en 1985, y 8,43 millones de horas en 1986.

Concentrar instalaciones

El plan de AESA indica que la distribución de las 255.000 toneladas de registro bruto compensado previstas para 1986 entre las cuatro factorías que actualmente se dedican a construir barcos produciría, aunque se aplicasen las reducciones de plantillas previstas, importantes pérdidas, dado que no se utilizaría de forma óptima el conjunto de instalaciones. De ahí que el plan se incline por la concentración de la producción prevista y por la especialización.

Siguiendo esta argumentación en el plan de AESA se afirma que no se ven posibilidades de mantener dos factorías, que se solapan en gran medida en su tipo de producción para nuevas construcciones en la ría de Bilbao. Los buques que puede producir Olavega pueden ser construidos en Sestao. Y no cabe duda que teniendo que optar por concentrar la producción de AESA-Bilbao en una de las factorías, la más idónea por su situación, capacidad y equipos, y la de más futuro, es la de Sestao". La empresa se inclina por mantene en Sestao la factoría de construc ción como "síntesis de las dos existentes" en la ría de Bilbao.

El plan también mantiene el cierre para nuevas construcciones en la factoría de Cádiz; destina a la factoría de Sevilla la construcción de buques de menos de 20.000 toneladas de registro bruto (preferentemente frigoríficos, multipropósitos y bulkcarriers); a la de Sestao, la construcción de buques de 15.000 a 45.000 toneladas de registro bruto (preferentemente petroleros, de productos químicos, bulkcarriers y portacontenedores); y a la de Puerto Real, la construcción de buques mayores de 40.000 toneladas de registro bruto.

El plan prevé concentrar las reparaciones navales en Cádiz y Olaveaga, y el desmantelamiento a medio plazo de la fábrica de motores de Sestao. La producción de éstos se concentrará en Manises. Asimismo propone la segregación de todas las actividades atípicas a la construcción naval "para su potenciación como empresas independientes en nuevos mercados".

Los restos de un naufragio

Viene de la página anteriorSe fijan directrices de carácter comercial, de saneamiento financiero (asunción de pérdidas, recapitalización, etcétera) y de desarrollo tecnológico y de promoción de nuevas actividades. Una de las claves de esta restructuración, aunque muy inconcreta hasta ahora, es la creación de puestos de trabajo alternativos para los excedentes. El plan da prioridad a los actuales trabajadores a ocupar las vacantes que se produzcan en el futuro, si se encuentran en los fondos de promoción de empleo.

Futuro de los centros

Junto a los planes generales de reestructuración de Astilleros Españoles se han elaborado, individualmente, los relativos a cada centro que trabajo. En síntesis, éstos son los planes que serán entregados mañana, lunes, a los diferentes comités de empresa:

- Puerto Real. En esta factoría se concentrará en exclusiva (se cierra la de El Ferrol) la construcción de grandes buques con tonelaje superior a las 40.000 toneladas. Se fija un objetivo de producción de 108.000 toneladas de registro bruto para esta factoría en 1986, lo que se traduce en 3,35 millones de horas de trabajo y una plantilla global de 3.408 personas. Esta cifra supone un excedente bruto de 443 trabajadores que, según la empresa, se absorbería por completo con jubilaciones y jubilaciones anticipadas.

- Cádiz. En la factoría de Cádiz se pretende continuar con la actividad exclusiva de reparaciones navales y grandes transformaciones, segregando los talleres de calderería, cuyo personal se considera excedente a efectos de la construcción naval, e introduciéndose en el campo de "reparaciones en viaje". Se estima una carga de trabajo para 1986 de 1,67 millones de horas, lo que corresponde a una plantilla de 1.927 personas (737 menos que en la actualidad). Una parte del excedente laboral, 491 personas, se elimina por jubilaciones y jubilaciones anticipadas.

- Sevilla. Esta factoría se dedicará en exclusiva a nuevas construcciones. Se fabricarán buques de menos de 20.000 toneladas de registro bruto. Se segrega como empresa independiente de Astilleros Españoles el denominado Departamento MacGregor, que con una plantilla de 108 personas se venía dedicando a actividades conexas de fabricación. La previsión para 1986 se fija en 55.000 toneladas de registro bruto, equivalente a 1,81 millones de horas de trabajo, para lo que se estima necesaria una plantilla de 2.017 personas (281 menos que en la actualidad). No obstante, según el plan, las jubilaciones y jubilaciones anticipadas no sólo absorben este excedente sino que crearían la necesidad de contratar a 147 personas al final del período.

- Sestao. La factoría de Sestao se dedica actualmente a nuevas construcciones (2.551 personas) y a la construcción de motores de dos tiempos (767 personas). Adicionalmente se encuentra integrado en la factoría un centro de trabajo denominado Proyectos Navales, que cuenta con una plantilla de 69 trabajadores y que va a ser segregada del astillero. El plan prevé concentrar en este astillero la actividad que hasta ahora realizaba el de Olaveaga, para conseguir así un objetivo de 92.000 toneladas de registro bruto en 1986 correspondientes a buques entre las 15.0100 y las 45.000 toneladas. Para estos objetivos se estima una plantilla de 2.834 personas (729 trabajadores menos que los que tiene en la actualidad). También en este caso el plan aduce que las jubilaciones y jubilaciones anticipadas absorben este excedente.

- Olaveaga. Deja de construir barcos y se convierte en sede principal de reparaciones de la ría de Bilbao. Dejará de fabricar motores de cuatro tiempos, sin perjuicio de que esta actividad se potencie con una o vanas empresas ajenas al astillero. La carga de trabajo prevista en 1986 se cifra en 176.500 horas lo que equivale a una plantilla de 200 trabajadores (en la actualidad cuenta con 2.461 operarios). El excedente laboral, 2.261 personas, se reduce por jubilaciones a 1.700. Para estos trabajadores el plan cita la "posible creación de nuevas empresas, su integración en los fondos de promoción de empleo y una posible incorporación a otras factorías".

- Asúa. Se dedica en la actualidad a la fundición de acero moldeado. Se segrega de Astilleros Españoles. Cuenta con 426 trabajadores que se convierten en excedentes. El plan habla de la posibilidad de crear nuevas empresas ajenas a la construcción naval.

-Manises. Se potenciará su actual actividad de fabricación de motores. La producción en 1986 corresponderá a una carga de trabajo de 802.500 horas, lo que hará necesaria una plantilla de 1.117 personas (similar a la actual). Las jubilaciones permitirán contratar de aquí a finales de 1986 a 224 trabajadores.

- Oficinas Centrales. Su plantilla crecerá de los 145 empleados actuales a 210.

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