España tiene intención de adherirse al acta de Contadora

El ministro español de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, anunció, en el marco de la Conferencia de San José, la decisión de su Gobierno de suscribir el protocolo adicional del acta de Contadora, que permite a terceros países adherirse a su texto. En el mismo sentido se manifestaron los cancilleres de Francia, Grecia y Portugal. Los demás países europeos se reservaron su opinión hasta que los Gobiernos centroamericanos decidan si firman o no firman el documento. Los cinco países involucrados directamente en el tratado aprobaron ya en líneas generales la versión revisada del acta, aunque casi todos han sugerido algunas modificaciones, a fin de reforzar los mecanismos de verificación.

Hasta ahora, sólo el coordinador de la Junta Sandinista, comandante Daniel Ortega, ha enviado una carta a los presidentes del Grupo de Contadora manifestando que el Gobierno nicaragüense está dispuesto afirmar el texto sin condiciones ni cambios.

Las autoridades guatemaltecas han pedido que se maticen determinados puntos, pero no han presentado serias objeciones. Los cancilleres de Costa Rica, El Salvador y Honduras se han mostrado más exigentes sobre la necesidad de endurecer los sistemas de control, coincidiendo así con la posición expresada por Washington. El embajador itinerante de Estados Unidos para Centroamérica, Harry Schlaudeman, realizará la próxima semana una nueva gira por la región para presionar a sus aliados a fin de que exijan en bloque modificaciones sustanciales. Esta versión ha sido confirmada por fuentes diplomáticas norteamericanas.

Esta iniciativa, sumada a la carta de Shultz a los cancilleres europeos, revela, a juicio del ministro nicaragüense de Exteriores, Miguel D'Escoto, el intervencionisrno de Estados Unidos en la región.

El anuncio hecho por su Gobierno a favor del acta de Contadora ha originado desconcierto en Washington, que creyó que los sandinistas nunca firmarían un texto de esa naturaleza.

Los cancilleres del Grupo de Contadora, que acudirán a Oviedo para recibir el Premio Príncipe de Asturias, analizarán las sugerencias formuladas por cada país en una reunión que podría celebrarse en España.