Los vecinos de Actur rechazan en referéndum la propuesta oficial de instalar casas para gitanos

Los vecinos del polígono Actur de Zaragoza rechazaron ayer mayoritariamente, en un referéndum popular, la última propuesta de los organismos oficiales, consistente en instalar provisionalmente 22 barracones en la zona para otras tantas familias gitanas, al mismo tiempo que se iniciaban los plazos concretos para dotar al barrio de mejoras y servicios. El resultado arrojó un 84,3% de votos negativos.

Todos los vecinos mayores de 18 años, de las 7.000 familias que viven en Actur, tenían derecho al voto con sólo presentar su documento de identidad. Las votaciones se realizaron durante toda la mañana -de ayer por comunidades de vecinos y se desarrollaron en un clima de "tranquilidad y civismo, a pesar de los anuncios insertados en la Prensa por los organismos oficiales y las cartas enviadas por el alcalde con una propuesta equivocada", según manifestó en conferencia de prensa un portavoz de la coordinadora de vecinos. "Se ha demostrado que los vecinos de Actur preferimos la democracia a la violencia y que siempre hemos estado abiertos al diálogo", añadió. Asimismo, hizo un llamamiento al alcalde para que se reúna con los representantes de los vecinos a fin de "informarle de nuestros puntos de vista por si todavía no los ha entendido".La campaña informativa llevada a cabo por las instituciones, así como las cerca de 6.000 cartas enviadas por el alcalde, Ramón Sainz de Varanda (PSOE), a los vecinos, fue duramente criticada y a punto estuvieron de paralizar las votaciones por considerar que tal postura "era una injerencia durante la jornada de reflexión". Los presidentes de escaleras y bloques fueron aportando los resultados de cada comunidad sobre las cinco de la tarde de ayer, y seguidamente se hizo el recuento de las votaciones: participaron 4.775 vecinos; de ellos, votaron en contra de la propuesta institucional 4.033; 604, a favor; hubo 109 papeletas en blanco y 29 votos nulos. Por tanto, el 84,3% de los votos fue negativo; el 12,7%, afirmativo, y el 2,3%, nulo o en blanco.

Es significativo que de los habitantes de las chabolas que tienen que derribarse, la mayoría gitanos, votaron siete, y de ellos todos en contra. En la cooperativa Pablo Iglesias, donde la mayoría de los vecinos son militantes de UGT y del PSOE, se registró el siguiente resultado: 649 votos en contra, 73 afirmativos, 19 en blanco y nueve nulos.

A partir de estos resultados el conflicto entró en una nueva fase: se espera que hoy no se reanuden las obras y que las partes busquen nuevas alternativas dentro de un clima de diálogo, tal como han expresado tanto las autoridades como los representantes de los vecinos.