Reunión de ex 'maquis' en el Pirineo de Lérida para homenajear a compañeros muertos
Unas 200 personas, entre ellas casi un centenar de ex maquis, se concentraron en la mañana de ayer en el cementerio de la localidad de Alòs dIsil (Lérida) para inaugurar una placa de homenaje a cuatro guerrilleros que fallecieron en el asedio a la población, defendida por la Guardia Civil, el 16 de octubre de 1944. La placa, colocada sobre la tumba de los cuatro guerrilleros, lleva la siguiente inscripción: "Los antiguos guerrilleros FFI (Forces Françaises de l'Intérieur), a sus camaradas muertos en combate por la libertad. Octubre 1944/Septiembre 1984."
Los guerrilleros sepultados en Alòs son Manuel Nieto, José Isús, un combatiente del que sólo se sabe que se apellidaba Guerrero y un maquis de nacionalidad francesa cuya identidad se desconoce. El presidente de la delegación catalana de la Asociación de Antiguos Guerrilleros Españoles en Francia, Santiago Bernabeu, resaltó que el homenaje se hacía "porque no podemos permitir que aquella lucha por la libertad quede en el olvido". La asociación tiene 5.000 miembros en Francia y unos 200 en España. Actualmente se realizan gestiones para constituir delegaciones en Valencia y Aragón.Esta asociación ha realizado homenajes semejantes en las localidades de Benasque (Huesca) y Les Bordes (Lérida), y piensa colocar otra lápida, la próxima primavera, en la localidad gerundense de Besalú. En la concentración estaban presentes un centenar de guerrilleros y representantes de la asociación francesa de ex combatientes de la resistencia contra los nazis.
Una maniobra de distracción
El suceso que se conmemoraba ayer en Alòs ocurrió el 16 de octubre de 1944. Fuerzas guerrilleras de la 526 brigada destacaron a 160 combatientes para el asalto del pueblo. Mientras ellos luchaban en Alòs, otras brigadas iniciaban la conquista de la Vall d'Aran. El asalto a Alòs duró más de nueve horas y terminó con la capitulación de las fuerzas de la Guardia Civil que defendían la pequeña población. La escaramuza se saldó con 5 muertos, los ayer homenajeados y un guardia civil alcanzado por un tiro en la frente.El coronel López-Tobar, jefe de la brigada que tomó Alòs, recordaba: "Fue una operación de distracción para mantener ocupadas las fuerzas de la Guardia Civil y facilitar la ocupación de toda la Vall d'Aran por parte de otras brigadas". Paralelamente a esta acción, otra brigada guerrillera, la 471, conocida como Pinocho, iniciaba el ataque a la vecina localidad de Esterri d'Aneu. Los de la 526 acudieron a reforzar el ataque, pero fueron rechazados por disparos de artillería.
La operación de la Vall d'Aran y el hostigamiento a los destacamentos de la Guardia Civil duraron 12 días, durante los cuales los guerrilleros republicanos hicieron 300 prisioneros. "Nuestra intención era transmitir un mensaje de aliento a los resistentes del interior de España. Nos interesaba sobremanera que supieran que había compañeros suyos luchando por la libertad contra el fascismo", recordaba ayer Jordi Xicola, otro de los ex combatientes que participó en las operaciones.
La ocupación de la Vall d'Aran se realizó con suma facilidad. Los ex guerrilleros recordaban ayer, divertidos, el eco que la acción tuvo en la prensa internacional, sobre todo en la norteamericana. "Entramos con canciones" recordó López-Tobar, "y disparando muy pocos tiros, aunque en las crónicas se relataran encarnizados combates".
En el homenaje a los cuatro guerrilleros muertos se encontraban presentes algunos vecinos de Alòs ,que fueron testigos presenciales de aquellos hechos. Una vecina, que no quiso revelar su identidad, explicó que en el mismo, cementerio estaban enterrados dos guerrilleros más que habían sido capturados por la Guardia Civil en escaramuzas anteriores, y que fueron fusilados en una,de las calles de Alòs.
Los cadáveres de estos combatientes fueron descubiertos hace poco, cuando se procedió a unas obras de remodelación en el cementerio.
Al acto había sido invitado el gobernador civil de Lérida, Antoni Pallarés, que excusó su presencia. Tras el homenaje, los ex maquis y sus familiares celebraron una comida de hermandad en la localidad de Espot.
