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La Generalitat anuncia medidas para reforzar la seguridad en la cárcel Modelo de Barcelona

El director general de Instituciones Penitenciarias de Cataluña, Xavier Hernández, anunció ayer una serie de medidas inmediatas para reforzar la seguridad de la prisión Modelo de Barcelona. Entre las medidas se cuentan un aumento de plantilla; la permanencia indefinida de la vigilancia exterior; la creación de un sistema efectivo de comunicación interna a base de transmisores-receptores y el reforzamiento e incremento de rejas, vallas, tela metálica y cerraduras.

Hernández anunció también un aumento del número de detectores de metal y la construcción de zonas de seguridad en las galerías para impedir la comunicación en caso de motín y dificultar el secuestro de funcionarios.Estas medidas, consideradas por Hernández como "coyunturales" y pertenecientes a una "política de parcheo", fueron tomadas en el curso de la reunión celebrada el pasado miércoles con la asistencia del conseller de Justicia, Agustí Bassols, y de altos cargos del departamento y de la cárcel Modelo.

Para el director de las cárceles catalanas los problemas de la prisión tienen una causa estructural que explica la periodicidad de los sucesos violentos en su inteñor, y éstos sólo se resolverán con la creación de un nuevo centro fuera del área urbana y el traslado consiguiente de la población reclusa.

La nueva prisión, que sustituiría a la Modelo, "debe construirse necesariamente en La Roca", según Hernández. El ayuntamiento de dicha localidad, situada a unos 30 kilómetros de Barcelona, hizo pública recientemente una nota en la que afirmaba que no permitiría de ninguna manera la instalación de un módulo penitenciario en el término de Can Ribas, de dicho municipio, como desde hace tiempo está decidido por el Ministerio de Justicia y por la Generalitat.

El alcalde, Joan Pujol, llegó a manifestar que "no queremos que nuestros hijos se conviertan de la noche a la mañana en los camellos que suministren droga a los presos".

Sobre la posibilidad de una huelga de los funcionarios. de la prisión, que podrían no incorporarse a sus puestos de trabajo a partir de mañana, día 1 de septiembre, el director de las penitenciarías catalanas aseguró que "el tema no ha sido tratado en la reunión, dado que toda huelga legal tiene unos canales apropiados y en este caso aquí no hemos recibido ninguna comunicación. Es más, durante la reunión efectuada en la misma cárcel inmediatamente después de sofocado el motín, en la que estuvieron presentes los funcionarios libres de servicio, no se habló del tema, pese a que el conseller animó a los presentes a abordar con toda libertad y sinceridad cualquier problema".

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Según Hernández, "en este caso lo que se daría no sería una huelga, sino un plante. Eso sería un abandono de servicio, una conducta ilegal calificada por el reglamento como falta muy grave".

"De todas formas", agregó, "yo sólo conozco el anuncio del plante a través de los medios de comunicación; lo demás son amenazas solapadas, hechas sin identificarse; no me ha llegado ninguna comunicación directa. Si se realiza el plante, posibilidad que no añade ni quita urgencia, ni condiciona la adopción de medidas, se aplicará la ley".

Hernández confirmó durante la entrevista el traslado del recluso Antonio Vázquez Sánchez, considerado el principal cabecilla del motín del pasado martes, al módulo tercero de la prisión provincial Lérida-2, previsto para presos calificados como muy peligrosos.

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