Mondale provoca una polémica en el Partido Demócrata al elegir a Burt Lance como jefe de su campaña

RAMÓN VILARÓ ENVIADO ESPECIAL, Walter Mondale, el futuro candidato demócrata para presidente de Estados Unidos, ha levantado una polémica entre los delegados de la convención demócrata que hoy comienza en San Francisco, con el nombramiento de Burt Lance como director de su campaña electoral y posible sustituto de Charles Manatt como presidente del partido. No obstante, esta determinación de seleccionar a Lance -ex miembro de la Administración del presidente James Carter- no pone en peligro el casi seguro triunfo de Mondale, que en la noche del próximo miércoles recibirá el nombramiento de la mayoría de los 3.933 delegados de la convención como candidato presidencial demócrata contra el actual presidente republicano, Ronald Reagan.

La convención se presenta bastante apacible ante la casi segura confirmación de Mondale, reforzado por su reciente decisión de escoger a Geraldine Ferraro para el puesto de aspirante a la vicepresidencia. Con Ferraro, miembro de la Cámara de Representantes por el Estado de Nueva York, Mondale espera potenciar sus posibilidades de triunfo en la elección presidencial del 6 de noviembre entre la franja del voto femenino, el católico y el del área noreste de Estados Unidos.Apuntalar el voto

Mediante la designación de Lance: como jefe de campaña, Mondale pretende precisamente apuntalar el voto demócrata en los Estados del sur de EE UU. Pero la opción de Lance para el cargo no satisface a todos los demócratas En especial a los representantes de los Estados del Oeste, que critican a Mondale su intención de desplazar a Manatt -un, abogado californiano de Los Angeles del puesto de presidente del Partido Demócrata.

Mondale se presenta como un líder político capaz de controlar la convención de su partido, que en cuatro días, de lunes a jueves, definirá un programa electoral y coronará al equipo Mondale-Ferraro como el más idóneo para intentar llegar hasta la Casa Blanca. Algo a lo que que deberán renunciar los otros dos aspirantes demócratas, Gary Hart y Jesse Jackson, que critican veladamente algunas de las decisiones de Mondale -como la de reemplazar a Manatt-, pero que acabarán haciendo campaña electoral a favor de su rival, de acuerdo con el objetivo global demócrata de vencer al presidente republicano, Ronald Reagan.

Con o sin oposición por parte de Hart -Y Jackson en el foro de la convención, Walter Mondale demuestra que está en la buena vía para acortar distancias con su contrincante republicano. Después de su decisión de nombrar a Ferraro como aspirante a la vicepresidencia, los sondeos de opinión reducen las diferencias entre Mondale y Reagan, aunque el actual presidente mantiene una ventaja de seis puntos, según un sondeo realizado por el Instituto Gallup.

Los demócratas monopolizarán la atención del público norteamericano a lo largo de esta semana de convencion demócrata, pero faltan todavía tres meses y medio antes de la elección presidencial. Un largo camino de campaña frontal entre demócratas y republicanos, con desenlace imprevisible, aunque todas las coordenadas apuntan hacia una reelección de Ronald Reagan.

Walter Mondale mantendrá, sin embargo, un papel de liderazgo durante estos días de la convención, que equivale a congreso del partido.