¿EL PAIS, contra los funcionarios?
Me veo en la delicada. obligación de explicarle por qué, desde esta fecha, no quiero seguir leyendo un periódico que he seguido diariamente, y admirado, desde su misma aparicion.Cuantos leíamos EL PAÍS en su primera etapa teníamos la convicción de contar con un diario independiente y crítico, ajeno a las conveniencias del Gobierno y de los omnipotentes grupos de presión en una sociedad que estaba reconstruyendo unos medios de comunicación destruidos al término de la guerra civil. No voy a entrar en pormenores sobre cómo esta confianza ha ido degradándose desde que contamos con un Gobierno socialista, aunque sí voy a precisar cómo se ha derrumbado de golpe en la última semana.
El pasado día 8 de junio publicaron ustedes un amplio informe de lo que para los demás periódicos fue una simple nota de prensa: la unificación de los cuerpos docentes no universitarios y la supresión de los actuales cuerpos de inspección educativa, a los que se pretende sustituir por funcionarios designados por el Gobierno. A lo largo de estos años he venido observando su inquina contra los funcionarios, y contra los docentes en particular, pero he hecho caso omiso por aquello de que nadie es perfecto. Al leer su informe no pude contener la impresión de que esta noticia era más suya que del vecino, porque estaba más cerca del partido en el poder.
La sospecha se ha ido confirmando a lo largo de los 10 últimos días. Ha habido una huelga de inspectores y se ha suscitado un amplio debate sobre la exigencia constitucional de profesionalidad e independencia de la Administración pública en toda la Prensa nacional, pero ustedes no han dedicado ni una línea al tema. Sólo el domingo 17 publican un resumen, que no es sino una maniobra del Ministerio de Educación con el fin de presionar en el desarrollo de las negociaciones. En conclusión:
- Han omitido ustedes unas noticias de las que tenían, y me consta porque les hemos informado, como al resto de la Prensa, el mismo conocimiento que sus competidores.
- Sólo han intervenido cuando y como le ha interesado al equipo del Ministerio.
Lo primero se llama censura informativa; lo segundo, Prensa de partido. Y para todo ello no necesitamos comprar un periódico: se nos impone cada día en las tres ediciones del telediario. Desde hoy tienen ustedes un lector menos.- Santiago de Compostela, La Coruña.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.