Mauritania acepta reanudar las negociaciones para un acuerdo pesquero con España
Mauritania ha aceptado en Roma, tras un lustro de contenciosos y resueltos con nuestro país, reanudar de inmediato (el próximo día 5, en Nuakchot) las negociaciones de un acuerdo pesquero con España. Este súbito acuerdo viene a confirmar el papel protagonista que nuestro país está teniendo en la Conferencia Mundial de Pesca que se celebra en Roma bajo los auspicios de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
En las últimas horas varias delegaciones (India, China y algunas naciones latinoamericanas) han incluido en sus intervenciones ante el pleno de la conferencia referencias elogiosas al discurso pronunciado en el acto de apertura por el rey Juan Carlos. Y los representantes de Francia y de la CEE han obviado cualquier referencia concreta a los problemas que les plantea en este sector la adhesión de España al Mercado Común.Los jefes de la delegación española -el secretario general de Pesca, Miguel Oliver, y el director general de relaciones pesqueras internacionales, Luis Casanova- no podrán estar presentes en la clausura de esta conferencia. La inmediata reapertura de negociaciones con España conseguida en este foro les impedirá encontrarse en él el próximo viernes cuando se aprueben las conclusiones. La ausencia no reviste mayor importancia, dado que no se esperan sorpresas desagradables para nuestro país. El proyecto inicial de conclusiones se debe en buena medida a nuestros funcionarios y recoge, por tanto, los puntos de vista y los intereses españoles. La presencia de representantes de nuestro país en la comisión redactora del documento final y en la vicepresidencia de la conferencia, por otra parte, dificulta el que terceros países incluyan enmiendas que puedan resultarnos inconvenientes.
Por lo demás, la conferencia transcurre mecánicamente sin grandes tensiones. Únicamente las intervenciones de Nicaragua y Cuba, que criticaron duramente a Estados Unidos, aunque sin nombrar expresamente a este país, recordaron el clima de enfrentamiento que vive el mundo en otros foros internacionales.
El representante nicaragüense criticó ante representantes de 154 naciones "a aquellos que en lugar de ofrecemos su ayuda desinteresada sólo nos ofrecen bloqueos, desolación y muerte, violando los más elementales principios del derecho internacional en el libre ejercicio de la pesca y el transporte en aguas nicaragüenses".
En este punto hizo un trágico balance. Dijo que durante el primer semestre de 1984 el sector pesquero de Nicaragua ha sufrido pérdidas por valor de 4,3 millones de dólares en sus exportaciones y 13 embarcaciones pesqueras: seis secuestradas, dos incendiadas y cinco hundidas por efecto de las minas colocadas en sus puertos.
Pero los medios materiales, dijo, tienen poco valor ante las pérdidas humanas. "Desgraciadamente nuestro sector pesquero ha tenido que aportar también cuota de sangre con 30 pescadores heridos, 19 secuestrados y cinco muertos, por efectos de los ametrallamientos y las minas". El representante nicaragüense dijo que el recuerdo de los pescadores muertos, "en quien reconocemos a los protagonistas del sector, como tan humanamente recomendó el rey Juan Carlos", les fortalece en el espíritu de lucha contra el imperialismo y la injusticia. Finalmente, y ante el asombro de los presentes (incluida la representante de Estados Unidos), solicitó un minuto de silencio "con espíritu cristiano" por los pescadores muertos en Nicaragua.
El representante de la CEE y el de Francia, que intervinieron ante el pleno en la sesión de la mañana, tuvieron exposiciones abstractas en el terreno de las buenas intenciones. Hablaron de la necesidad de cooperar entre los países ribereños vecinos para preservar el futuro de la riqueza marítima y proceder a una explotación racional de la misma.
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