La tardía visita

Muchos atribuyen la frase "yo no actúo en África" a Bob Dylan y a David Bowie. Lo cierto es que ninguno de los dos músicos, pese a las grandes ofertas recibidas, ha toca do hasta hoy en España.El cantante-compositor, reno vador y denunciador de los sesen ta, Zimmerman-Dylan, ha incluido nuestro país dentro de su gira europea quizá porque las cosas ya no le van tan bien. Sus tres últimos discos, Saved, Shot of love e Infidels, han tenido ventas muy bajas en comparación a anteriores elepés. A las siete de la tarde de ayer sólo se habían vendido la mitad de las entradas, lo que prueba la mediana expectación para el concierto de esta noche en el Estadio de Vallecas. El próximo día 28 de junio actuará en el miniestadio del Club de Fútbol Barcelona.

Dylan, quizá agobiado, no quiere ejercer de hombre público y adopta la misma actitud que otras estrellas caídas ante los medios sonoros y escritos. Rod Stewart se comportó así hace pocos días. Es difícil obtener de ellos declaraciones y España no es una excepción al mutismo que prefieren personajes como Bob Dylan. Ellos están allí, arriba, y sus palabras pueden ser mal interpretadas. Es, sin duda, la postura cómoda. Dylan aparecerá pasadas las once de la noche con su banda: Mick Taylor, que estuvo en su época en los Bluesbreakers de John Mayall y en otra en los Rolling Stones, a la guitarra, Greg Sutton, al bajo, Ian McLaghen, a los teclados, y Colin Allen, a la batería. Es decir, músicos no le faltarán a este judío que para unos quedará como un tipo muy listo y para otros como un genio.

Poco interés ha levantado la actuación de Santana, un guitarrista que no ha dejado de repetirse en los últimos años, pero que ha sabido cambiar de grupo para ofrecer una base y arreglos diferentes al consabido sonido de su guitarra. La banda que nos visita supera a las de ocasiones pasadas: Steve Rainsey, David Sancious y Chester Thompson Dee, a los teclados, John David Crocket, Orestes Vilato, Armando Peraza y Raul Renkow, a las percusiones, Alphonso Johnson, al bajo y Greg Walker y Alex Ligertwood, a las voces principales.