La policía controlará las mercancías que se venden en el mercado 'negro' de Vicálvaro

Policías municipales y nacionales controlarán la procedencia de las mercancías que venden las familias de raza gitana asentadas en el barrio madrileño de Vicálvaro, ha declarado Francisco Garrido, presidente de la Junta Municipal del Distrito de Moratalaz. Esta medida forma parte de un plan de acciones urgentes para solucionar el conflicto suscitado en el barrio citado, antiguo municipio independiente, por el crecimiento incontrolado del poblado de chabolas de la avenida de Daroca, donde están instaladas en la actualidad más de 400 familias.

Muchas familias de raza gitana, expulsadas de otros barrios, se han trasladado a lo largo de este año a la carretera de Ventas a Vicálvaro, donde hay instalado un próspero mercado negro, conocido popularmente como guarrerías preciados, en el que en muchos casos, según el concejal, se venden productos robados. Además del pintoresco bazar al aire libre, ubicado al borde de la carretera, en el que se venden, entre otras cosas, bañeras, lavadoras y toda clase de piezas para el automóvil, existe un tráfico importante de armas y drogas, según afirmó el concejal.El plan de medidas urgentes sobre los asentamientos gitanos de Vicálvaro, que pondrán en marcha de forma conjunta el Ayuntamiento de Madrid, el Gobierno Civil, el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU) y las juntas de distrito de Moratalaz, San Blas y Ciudad Lineal, supondrá también la expulsión de la zona de todas aquellas familias que han instalado sus chabolas recientemente. El pasado año, según Garrido, se realizó en el asentamiento gitano un censo de población. Las 380 familias que recibieron placas de identificación del ayuntamiento el pasado año se quedarán en la zona. "Todas aquellas personas que hayan llegado después serán expulsadas, y sus chabolas, derruidas".

Viviendas nuevas

Entre las familias que deben abandonar el barrio, de acuerdo con los planes municipales, se encuentran numerosos gitanos de origen portugués, muchos de los cuales entraron en España de forma ilegal. El concejal Garrido anuncia, en este sentido, que serán expulsados del país todos los que se encuentren en situación irregular. La operación se llevará a cabo de forma conjunta con el Ministerio del Interior, según la misma fuente.El concejal afirmó también que el MOPU estudiará e investigará la situación individual de cada una de las familias que residen en el asentamiento para facilitarles una vivienda digna. "No descartamos", afirmó el concejal, "que algunas de estas personas hayan recibido en alguna ocasión una vivienda de protección oficial que después han vendido". Según el presidente de la Junta Municipal del Distrito de Moratalaz, en controles realizados en otros barrios se han descubierto casos de fraude a la Administración. "En concreto", aseguró, "en el distrito de Villaverde se descubrió el caso de una persona que había recibido del Estado 11 pisos".

Agentes de la Policía Nacional vigilan ya el asentamiento gitano de Vicálvaro, que es el más numeroso de la ciudad, para evitar enfrentamientos con los payos. A lo largo del mes de junio, grupos de vecinos del barrio se han manifestado reiteradamente para expresar su protesta por el crecimiento incontrolado del poblado chabolista.

La erradicación de las viviendas que no reúnen condiciones de habitabilidad y la integración de la población gitana se realizarán de forma conjunta en todo el país.