Una polémica actuación de las fuerzas de seguridad

La muerte en Pasajes de cuatro miembros de los Comandos Autónomos Anticapitalistas (CAA) que ocupaban un bote neumático, por disparos de efectivos policiales que les esperaban en tierra, es uno de los sucesos que más polémica han levantado en Euskadi.Días después de producirse dicho suceso, los obispos de Pamplona y San Sebastián, José María Cirarda y José María Setién, calificaron la acción policial de "especialmente grave" y afirmaron que "no se puede matar al enemigo sólo porque lo sea".

Existe una gran contradicción de versiones sobre este suceso: la policía insiste en que los ocupan tes del bote neumático eran cinco y que uno de ellos resultó ileso por llevar chaleco antibalas, pero el superviviente, José Luis Merino lo niega, al afirmar, en declaración judicial, que fue detenido con anterioridad y trasladado al lugar de los hechos, y que nunca usó el citado chaleco.

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La que sin duda sí fue trasladada a Pasajes es Rosa María Jimeno Goikoetxea, empleada de Ayuntamiento de Orio y amiga de uno de los terroristas, Dionisio Aizpuru.

Rosa María Jimeno, detenida días antes, fue utilizada, al parecer, como cebo para que el comando acercara el bote a la costa. Los policías esperaban ocultos.

Un alto responsable de la policía antiterrorista comentaba recientemente a EL PAIS que se "estaba hablando en los periódicos demasiado de Rosa María Jimeno y que corría el riesgo de que se la pudieran picar sus propios compañeros".

Rosa María Jimeno se encuentra en la prisión madrileña de Yeserías, conviviendo con otras dos reclusas de los CAA, y José Luis Merino, en la de Alcalá-Meco, también en compañía de unos 10 presos de los CAA.

Las diligencias sobre el caso las lleva el Juzgado de Instrucción número 2 de San Sebastián, cuyo titular es el juez Eduardo Calvo Rojas. Poco después de producirse el suceso, proliferaron los testigos y las declaraciones de instituciones autonómicas contrarias a la versión policial. El juez recurrió al edicto y nadie se presentó voluntariamente. Judicialmente, la única versión que existe del suceso es la policial.

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