Ninguna corrida despierta la atención en El Batán

Cinco corridas de toros y una novillada se exhiben en los corrales de la Venta del Batán, y ninguna destaca por su presencia o trapío. Son todos ellos toros aceptables para la plaza de Madrid, aunque en línea discreta y sin exageraciones. Sólo la corrida de Félix Hernández Barrera tiene cierta espectacularidad, pero viene excesivamente gorda y cómoda de cabeza. Estos toros los matarán, el próximo día 20, Ruiz Miguel y los hermanos Campuzano. Corrida para público dominical, y ya se sabe que estas tardes se montan en Las Ventas con ganado incómodo para toreros a los que trae sin cuidado el hierro o la casta de los toros.Los toros de Murteira Gravé traen caras serias y hechuras más enjutas, por lo que resultan menos llamativos, pero no cabe duda de que son toros auténticos.

La corrida, más terciada es la de José Luis y Nicolás Fraile. Es, además, una corrida fea, con algunos toros que parecen de desecho de tienta.

En la corraleta de la corrida de Sepúlveda había revuelo y expectación. Se habían peleado dos toros, y el público, un tanto alarmado e inquieto, rodeaba las encaladas paredes y hacía nerviosos comentarios. El toro agresor sangraba visiblemente por el hocico, solitario y alejado de sus compañeros, que le miraban con respeto.

Los toros del Conde de la Corte vienen en la línea habitual de esta ganadería, conocida por el desarrollo y aparatosidad de sus defensas. Hay dos playeros y el resto no desentona de las características de estas reses, criadas en Fuente de Cantos. Van destinados a Angel Teruel, Curro Vázquez y Yiyo, uno de los carteles más atractivos del serial, el jueves 17 de mayo.

Se ve muy escogida la novillada de Torrestrella. Los taurinos dirán que es muy bonita, y en esta ocasión puede que coincidan con el público. Porque los novillos de Álvaro Domecq están muy parejos, son finos de lámina y tienen variedad de pelo, fuera de la monotonía de las capas negras que se ven en los demás corrales. Morirán a manos de Lucio Sandín, Julián Maestro y Jaime Malaver.