Serie B

La crisis es para todos, por lo que es normal que se refleje en la programación de las salas, por mucho prestigio que éstas tengan a la hora de seleccionar artistas, y a pesar de que, esporádicamente, disfrutemos, como es el caso de esta semana, de los elaborados shows de los consagrados -Simple Minds, con China Crisis de teloneros, nada menos.Tal como ocurre con el cine de Serie B, han de buscarse otro tipo de satisfacciones, quizá más modestas en lo material, pero cualitativamente más interesantes. El problema es que este tipo de grupos esté o no en condiciones de ofrecerlas.

La sala Rock-Ola ha presentado en estos últimos días dos opciones bien diferenciadas, en cuanto a estilo y resultados, de las posibilidades de la Serie B.

El viernes y sábado pasados, King Kurt, seis jóvenes londinenses con un maxi-single y un elepé recién editado aquí por todo aval discográfico, deleitaron a una minoritaria audiencia a base de una desfachatez inusitada y un sonido contundente que combinaba una serie de estilos claramente confluyentes -rockabilly, rythm and blues, tex-mex- y algún ramalazo ocasional de ska o punk.

Los músicos recordaban a sus compatriotas los Madness, a pesar de no poseer tan buenas canciones y de ser increíblemente más gamberros -su show consistió en arrojar sacos de harina y huevos al respetable.

El conjunto resultaba y el componente lúdico se imponía continuamente a la ortodoxia musical, demostrando una vez más que el interés primitivo del rock sigue siendo, a pesar de todo, la diversión indiscriminada. El Rey Kurt dejó, sin duda, un buen sabor de boca y la posibilidad abierta al regreso en fechas próximas, esta vez esperemos que con mayor publicidad.

'After-punk', marea negra

Los que tal vez no dispongan de esa oportunidad, a juzgar por lo que ofrecieron el lunes en la mencionada sala, son Peter and the Test Tube Babies, claro exponente de lo difícil que es no ahogarse en esa turbia marea negra llamada after-punk. Con formación clásica de guitarra, bajo, batería y voz, más un guitarrista de refuerzo, los Chicos de la Prueba del Tubo no con siguieron ni siquiera calentar al también escaso público seguidor del grupo y de su carrera discográfica, dos elepés y varios singles sin editar en nuestro país.Pasables los temas punk y tediosos los que intentaban adentrarse en otros esquemas sonoros, Peter and Co. dieron muestras de su veneración por los buenos tiempos del punk -Damned- y de lo patético que resulta tratar de hacer verosímil lo que ya ni uno mismo se cree.

El próximo fin de semana tendremos ocasión de ver en el mismo recinto a otro grupo de Serie B, aunque con ex componentes de bandas tales como Sex Pistols, Heartbreakers y Only Ones: Pati Palladin Group, compitiendo en interés con Max Romeo y sus Reggae Regular, que actuarán en la sala Imperio, de Madrid.