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LAS VENTAS

Frío , lluvia y vulgaridad

La tarde no ha podido ser más horriblemente antitaurina. A lo desabrido del clima se unió lo vulgar del festejo, a lo que contribuyó el mal juego de los novillos, muy blandos de remos y de corta embestida. Es posible que con ganado de más fuerza y empuje los novilleros hubieran destacado más, porque apuntaron algunas cositas. Pero el pésimo ambiente, la lluvia molesta y las escasas cualidades que aportaban las reses contribuyeron a dibujar el cuadro de la vulgaridad.Julián Maestro aguantó las tarascadas de su primero sin descomponer la figura e hizo una faena compuesta en el cuarto, al que porfió sin ver su querencia a los tableros. En sus maneras se apreció el aprendizaje de una escuela taurina.

Plaza de Las Ventas, 19 de marzo

Novillos de Francisco Rubio ,feos, muy flojos, mansurrones. Devuelto el segundo por inválido; sobrero de Lisardo Sánchez, flojo. Julián Maestro: silencio en los dos. Emilio Oliva: vuelta; silencio. Sánchez Marcos: silencio en ambos.

Emilio Oliva aprovechó la suavidad del Lisardo y lo pasó de muleta en el centro del ruedo, con la figura retorcida. Vulgar con la derecha y algo mejor con la izquierda, arrancó una vuelta al ruedo por su cuenta.

Sánchez Marcos no se acopló con el primero de sus enemigos, que se quedó muy débil de remos tras una voltereta de salida. En el sexto estuvo mejor, corrió la mano con maestría y templó con gusto. Pero ya apenas quedaba nadie para apreciarlo.

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