Escasa incidencia en el País Vasco de la huelga convocada por CC OO por el plan de Aceriales

Muy escasa incidencia tuvo en el País Vasco la huelga general convocada por CC OO en contra del plan de reestructuración de las empresas del sector de aceros especiales integradas en el holding Aceriales, que era también apoyada por los partidos PCE-EPK, EMK y Auzolan, pero no así por las centrales UGT y ELA-STV, que hace unos días firmaron un acuerdo con la dirección del holding, ni por HB y el sindicato LAB. Por su parte, la delegación del Gobierno en el País Vasco salió ayer al paso de "algunas manifestaciones de altos dirigentes del PNV", precisando que el Gobierno central aportará subvenciones y créditos por un importe total de 52.700 millones de pesetas para el saneamiento financiero y modernización tecnológica de las empresas del sector.

En Bilbao no funcionaron ayer los autobuses públicos, pero no como consecuencia directa de la convocatoria de huelga, sino por haberlo decidido así la empresa concesionaria del servicio ante el temor de que volvieran a repetirse las acciones violentas contra los vehículos producidas últimamente. Según CC OO, la huelga afectó al 30% de los trabajadores del sector en las provincias de Vizcaya y Álava, y al 15% de los de Guipúzcoa. UGT, sin embargo, señaló que la incidencia del paro no fue superior al 1% de la población laboral de la provincia, registrándose paros parciales únicamente en algunas factorías de la margen izquierda del Nervión, como General Eléctrica y AESA, de Sestao, y Altos Hornos, en la planta de Ansio.En Álava sólo se registraron paros parciales en Cablenor y Mevosa, de Vitoria, aparte de Aceros de Llodio, cuya plantilla siguió las movilizaciones que ya se venían produciendo en días precedentes.

En Guipúzcoa, la convocatoria de huelga general obtuvo escaso eco y el porcentaje de paro no alcanzó, probablemente el 10%. Entre las empresas que cerraron ayer figuran Múgica y Escalante, de Irún; Girondine y Metales Inyectados, de Rentería, y Zorrotz, de Legazpia. Fuentes de CC OO atribuyeron la escasa incidencia de la huelga al paro en el sector del metal convocado para la víspera, informa José Luis Barbería desde San Sebastián.

Según CC OO, la convocatoria de paro del metal respondía al propósito de romper la huelga planteada para ayer por esa organización sindical y por los trabajadores de Orbegozo, que continuaron protagonizando manifestaciones, encierros y cortes de carreteras. La plantilla de esta empresa ha rechazado los acuerdos de Aceriales suscritos por UGT y ELA-STV, y exigen que, se levanten las 242 órdenes de despido o de jubilación anticipada remitidas a otros tantos trabajadores. Las mujeres de los despedidos llevaron a cabo un encierro el jueves en la Dirección Provincial de Trabajo de San Sebastián, cuyo titular les prometió mediar en el conflicto.

Resultados "modestos"

Tomás Tueros, secretario general de CC OO de Euskadi, reconoció que los resultados de la convocatoria habían sido "modestos", pero añadió que "los verdaderos efectos de esta iniciativa se verán no ahora, sino dentro de algunos meses". Negó Tueros cualquier influencia de la coyuntura electoral en la decisión de su central de mantener la convocatoria pese a los acuerdos del fin de semana pasado, ya que, explicó, "CC OO no tiene ninguna relación ni con el Gobierno vasco ni con el central, que son, en todo caso, quienes tenían interés electoral en que Aceriales no se volviera en su contra".Por su parte, Ramón Jáuregui, delegado del Gobierno en Euskadi, en conferencia de prensa celebrada en Bilbao, recordó que en los próximos tres años la Administración central destinará 14.800 millones de pesetas en subvenciones a fondo perdido y 37.900 millones de pesetas en créditos oficiales al reflotamiento del sector de aceros especiales, que cuenta en España con una plantilla total de 10.000 tarbajadores, de los que 7.000 pertenecen a empresas vascas.

Recordó Jáuregui, en respuesta, según dijo, a algunas intervenciones recientes de dirigentes del PNV, que el Gobierno vasco cuenta con dos delegados en el consejo de administración de Aceriales, los cuales no. habían expresado desacuerdo alguno con el plan de reconversión previsto. Hasta el momento se ha invertido en las cuatro empresas de Aceriales un total de 8.000 millones, de los que 1.000 han sido aportados por el Gobierno de Vitoria y el resto por la Administración central. En los próximos tres años se invertirán otros 53.000 millones, de los que 15.000, a fondo perdido, se destinarán a financiar los intereses de los préstamos y las indemnizaciones y percepciones complementarias del personal excedente y 20.000 millones a inversiones en activos fijos.