La adjudicación del 'metro' de Medellín es reglamentaria, según Entrecanales

La empresa Entrecanales y Tavora, cabeza del grupo de empresas españolas que participa en el consorcio hispano-alemán al que se le adjudicó la contrata para la construcción del metro de Medellín (Colombia), salió ayer al paso de la protesta por supuestas irregularidades en la concesión del proyecto, presentada por otros consorcios licitantes, señalando que la adjudicación se había realizado de forma totalmente reglamentaria.La compañía española subraya que la evaluación de las ofertas se ha llevado a cabo por un equipo de entidades colombianas y de otros países, entre las que se encuentran Integral, Mejía, Vinegas, Habitar, Indisa, la británica Lloyd's y la suiza Electrowatt, a la que se acusa por parte de Francorail, integrante del consorcio francés, de estar relacionada con Siemens, miembro del consorcio hispanogermano adjudicatario.

Apertura de una investigación

Las valoraciones de estas entidades se han complementado, a su vez, con las del personal técnico de la Empresa de Transporte Masivo del Valle Avurrá (ETMVA), propietaria del metro. El informe elaborado por estas entidades fue sometido a la gerencia de esta empresa, añade Entrecanales, quien lo presentó a una junta de notables integrada por personas de prestigio dentro de la vida pública colombiana, y que fue nombrada por el propio presidente, Belisario Betancur. "Este complejo procedimiento de adjudicación garantiza la imparcialidad del sistema y está por encima de suponer que contratos de tanta envergadura en concursos internacionales se adjudiquen sólo mediante lazos de "amistad personal", añade la empresa española.A raíz de la protesta presentada al presidente de la República por franceses, británicos y por el consorcio de empresas de la República Democrática Alemana y del Instituto Nacional de Industria (INI), el presidente Betancur ordenó a la Procuraduría General de Colombia la apertura de una investigación para esclarecer las condiciones de la adjudicación de la contrata. Tanto el consorcio francés como el británico ya han anunciado que impugnarán la adjudicación en caso de que el contrato se firme antes de que finalice la investigación en curso.