La presunta falsificación de la firma de un fiscal, nueva incógnita en la liberación del 'mafioso' Bardellino

La investigación abierta por el Consejo General del Poder Judicial sobre las presuntas irregularidades que han rodeado la puesta en libertad provisional del jefe de la Camorra, organización mafiosa napolitana, Antonio Bardellino, deberá analizar un nuevo elemento: la presunta falsificación de la firma de un fiscal de la Audiencia Nacional en la notificación del auto de libertad del camorrista, según informaron a este periódico fuentes jurídicas solventes.

El fiscal de la Audiencia Nacional afirma que la libertad de Antonio Bardellino no le fue notificada, y que por eso no pudo recurrir la decisión dictada por el juez Ricardo Varón Cobos, que actuaba interinamente en el caso por enfermedad del juez titular. En todo proceso judicial es preceptiva la notificación a las partes, una de las cuales es el ministerio público, de los autos o resoluciones dictados por el juez.El fiscal, cuando se enteró de la medida, presentó un escrito en el que pedía el ingreso en prisión del camorrista, que fue admitido por el titular del juzgado número 5, Francisco Castro, quien inmediatamente ordenó la búsqueda y captura del delincuente, sobre el que pesaba una petición de extradición del Gobierno italiano.

En las actuaciones, según manifestaron las fuentes citadas, figura como realizada la diligencia de notificación al fiscal, en la que constan una firma, presuntamente falsificada, y la palabra "visto". De probarse, a través del informe de un perito calígrafo o procedimiento similar, que la firma citada no es auténtica, su inclusión en la diligencia constituiría un delito de falsificación en documento público, además de los posibles delitos de cohecho y prevaricación que están siendo investigados.

Antonio Bardellino, Tonino, de 38 años, fue puesto en libertad bajo fianza. de cinco millones de pesetas a finales de enero. Sobre las extrañas circunstancias que aparentemente rodearon su excarcelación, el Consejo General del Poder Judicial ordenó la apertura de una investigación.

Juez instructor

Para esta misión ha sido nombrado juez instructor Eduardo Fernández Cid, magistrado de la Sala Primera, de lo Civil, de la Audiencia Territorial de Madrid, que tiene competencia y facultades para nombrar a un secretario y un auxiliar que le ayuden en la investigación. Cuando concluya las indagaciones, el magistrado Fernández Cid deberá elevar un informe a la Comisión Disciplinaria del Consejo General del Poder Judicial.Esta comisión ha anunciado que remitirá el resultado de las investigaciones a la fiscalía del Tribunal Supremo. Si se detectaran irregularidades o negligencias, la fiscalía presentaría contra los magistrados que puedan estar implicados una querella de antejuicio, que es el cauce penal que se debe seguir contra los jueces o magistrados.Bardellino, considerado como el jefe del tráfico de droga entre Suramérica y Europa, y contra el que pesaba una orden de captura internacional y otras seis de la magistratura italiana, fue detenido en Barcelona en noviembre de 1983, junto a su guardaespaldas Scarnato y dos más de sus hombres, Pasquale Pirolo y Roberto Ferrara. Las autoridades italianas reclamaron a los cuatro, y sólo Pirolo y Ferrara accedieron a volver a Italia.

Posteriormente, Bardellino fue puesto en libertad, y el Consejo del Poder Judicial ordenó la investigación ante las presuntas irregularidades detectadas. La investigación tendrá que comprobar si, como aseguran fuentes solventes, la libertad le costó a Bardellino los buenos oficios de una mujer y 15 millones de pesetas, de los que sólo 5 fueron utilizados para pagar la fianza.