Israel no renuncia al compromiso con el Gobierno de Beirut

El primer ministro israelí, Isaac Shamir, declaró anoche que Israel nunca renunciará al acuerdo con Líbano sobre separación de tropas en este país. Dirigiendose a dirigentes judíos norteamericanos, Shamir dijo: "La firma de Israel en aquel documento es un hecho histórico y de derecho internacional. No renunciaremos ni a nuestra firma ni a nuestra disposición a hacer que se pongan en práctica los términos de aquel compromiso bilateral", informa Reuter.Por otra parte, la práctica desaparición del Ejército libanés y la conquista de Damur por las fuerzas drusas podría llevar a Israel a un drástico cambio de la actitud, hasta ahora pasiva, mantenida frente a la guerra civil libanesa, informa Victor Cygielman.

El Gobierno israelí ya ha advertido contra la presencia de palestinos en las posiciones de las que fueron desalojados por el Ejército israelí hace año y medio. Ayer, patrullas israelíes cruzaron el río Awali para buscar en la zona a posibles milicianos palestinos.

En medios gubernamentales se considera con preocupación el hecho de que los dirigentes drusos hayan incumplido la palabra dada a los israelíes cuando éstos evacuaron la región montañosa de Chuf y hayan sacado a sus fuerzas de la montaña e incluso hayan colaborado con los palestinos de Abu Musa en el asalto de, Damur.

El ministro israelí de Defensa, Moshe Arens, ya ha advertido públicamente a drusos y chiitas que no deben seguir por la vía de la colaboración con los palestinos porque lleva directamente al enfrentamiento con Israel. "Si Walid Jumblat actúa contra los intereses vitales de la seguridad israelí deberemos considerarle como un enemigo", dice Arens.

La creciente desestabilización de Líbano y la evolución hacia posiciones anti-israelíes de Jumblat -que se siente cada vez más fuerte gracias a su alianza política con los sirios y la alianza militar con los chiitas- podría colocar bien pronto a Israel ante una difícil disyuntiva, según los analistas: o replegar el Ejército hasta posiciones más al sur o intervenir en la guerra. Por lo pronto, ya empiezan a oírse voces que piden la vuelta de Ariel Sharon a un puesto clave en el Gobierno. Ahora es ministro sin cartera.