Homenaje en Hendaya a los dos 'etarras' asesinados
Un millar de personas, refugiados y familiares de refugiados en su práctica totalidad, homenajearon anoche en el frontón de Belzenia, de Hendaya, a Vicente Perurena y Ángel Gurmindo, miembros de ETA Militar asesinados hace una semana en esa misma localidad francesa por el denominado Grupo Antiterrorista de Liberación (GAL).Gritos de "Gora Eta Militar", "Gora Stein", y "Gora Peru" (sobrenombres de los dos fallecidos) acogieron la llegada al frontón de las cenizas de los refugiados, cuyos cadáveres fueron incinerados ayer en Burdeos. La madre de Gurmindo y la viuda de Perurena exhibieron las urnas que contenían las cenizas, entre los aplausos y el clamor de los asistentes al acto. La reunión se había iniciado con la actuación de un grupo musical del País Vasco francés y la intervención de los bertsolaris Amuriza y Alkat.
Dos de los hijos de Vicente Perurena leyeron en euskera sendos escritos dirigidos a su padre y a Gurmindo, en los que manifestaba la voluntad de continuar la lucha y en los que se señaló: "El pueblo no perdonará". A contiunuación, Manuel Pagoaga Peixoto, un refugiado que perdió la vista en un atentado del que fue víctima años atrás, se dirigió al resto de los refugiados indicándoles, también en euskera: "Tenemos que ganar antes de que los montes,y los ríos se conviertan en cementerios. No somos ni vascos españoles ni vascos franceses, tenemos una madre a la que no debemos despreciar. Es fácil gritar aquí o en el otro lado 'gora Euskadi askatuta', pero los que son consecuentes con esa idea terminan como nuestros amigos".
Tras el acto, que se desarrolló en un ambiente de extraordinaria tensión y emotividad, las cenizas fueron depositadas en el Ayuntamiento de Hendaya.