El debate sobre la reforma sanitaria entre colegios médicos y Administración provocó la dimisión de Ramiro Rivera
El debate sobre la reforma sanitaria prevista en la Ley Básica de Sanidad se encuentra, según fuentes del sector, en el fondo de la dimisión irrevocable del presidente del Consejo General de Colegios de Médicos, Ramiro Rivera. Éste, que se ha negado a precisar las causas de su dimisión, confirmó, en unas breves declaraciones a Efe, los puntos ya expuestos en su carta de dimisión y que hizo pública el pasado sábado. Ayer se entrevistó con el presidente en funciones de la organización médica colegial, José Luis Gutiérrez Herrero.
Ramiro Rivera explicará por escrito en el transcurso de esta semana a los presidentes de los colegios "las verdaderas razones de su dimisión, según explicó Gutiérrez Herrero, quien añadió que, tras la breve entrevista mantenida ayer con el doctor Rivera tiene la impresión de que éste no va a volverse atrás de su decisión "a pesar de que la asamblea de presidentes de colegio de médicos le ha pedido que reconsidere su postura".En opinión del actual presidente en funciones de la organización médica colegial no ha existido ningún problema de entendimiento dentro del consejo "aunque sí algunas discrepancias que podían calificarse como normales". El próximo domingo están convocados los presidentes de colegios para tomar una decisión definitiva sobre la dimisión de Ramiro Rivera y para anunciar, si procede, nuevas elecciones.
Algunos medios sanitarios siguen manteniendo que el detonante de la crisis que ha provocado la dimisión de Rivera fue la denuncia realizada por la Federación de Asociaciones de Defensa de la Sanidad Pública, sobre posibles presiones a laboratorios farmacéuticos a través del análisis de contenido de las revistas especializadas financiadas por la industria farmacéutica.
Tras esta denuncia, las autoridades sanitarias citaron a representantes de Farmaindustria, la patronal de la industria farmacéutica, para pedirles que rechazaran estos métodos de presión. Farmaindustria, posteriormente, decidió comunicar a Rivera que le retiraba su confianza.
Sin embargo, al fondo parece estar la reforma sanitaria propugnada por la ley Básica de Sanidad. En este sentido, fuentes consultadas señalan la existencia de un sector minoritario dentro de la actual cúpula dirigente del Consejo, que no quiere ver cerradas las vías para un diálogo con la Administración en torno a las condiciones del ejercicio profesional de los médicos.
UGT valora la ley
El sindicato UGT ha realizado una valoración del borrador de anteproyecto de ley básica de Sanidad en la que hace precisiones a varios puntos y pide la modificación o supresión de algunos artículos. UGT señala que el borrador debe aclarar el tiempo previsto para realizar el cambio de la forma de financiación, y hasta entonces debe garantizar una distribución de los recursos de la Seguridad Social según criterios de necesidad, y no teniendo en cuenta solamente el número de beneficiarios de ésta.La ley debería fijar la fecha a partir de la cual el sistema es universal, señala también UGT, así como hacer una definición en positivo sobre la gratuidad que garantice la igualdad en el acceso a los cuidados sanitarios. Aboga el sindicato por una única situación jurídica para todos los trabajadores de dicho servicio y propone que la Ley General de Sanidad garantice la elaboración de un estatuto de personal del Servicio Nacional de Salud que se integre en la ley de medidas para la reforma de la función pública.
