Manifestaciones de trabajadores y críticas patronales contra la política del Gobierno

Empresarios y trabajadores coincidieron ayer, por motivos diferentes, en la crítica a la política económica del Gobierno. Unos 500.000 trabajadores, según estimaciones de Comisiones Obreras -central convocante-, se vieron afectados ayer en diversos grados por las movilizaciones de protesta contra la reconversión industrial; varias decenas de pueblos andaluces fueron testigos de diversas acciones de los jornaleros, contrarios a la implantación del nuevo subsidio de desempleo agrario, y en Madrid, más de 2.000 empresarios aplaudieron las intervenciones de distintos dirigentes patronales que criticaron frontalmente el conjunto de la actuación del Gabinete socialista.

Unos 400.000 trabajadores, según CC OO, se vieron afectados por los paros llevados a cabo en el día de ayer en protesta por la política de reconversión industrial del Gobierno. A esta cifra habría que añadir otras 100.000 personas que se sumaron a las manifestaciones y concentraciones, y las afectadas por la huelga general convocada en Gijón (donde se produjeron incidentes violentos), Puerto Real (Cádiz), Getafe (Madrid) y Sagunto (Valencia). La mayor crispación de la jornada se produjo en Gijón, donde dos trabajadores resultaron heridos como consecuencia de los enfrentarnientos registrados entre huelguistas y fuerzas de la Policía Nacional. En la mayoría de las zonas conflictivas, UGT no convocó a las acciones. Sin embargo, la central socialista se une hoy con CC OO y ELA-STV en nuevas acciones de protesta contra la rescisión de contratos, localizadas fundamentalmente en Euskadi y Cataluña.En Andalucía, el balance de la jornada se concretó en huelgas generales o parciales, encierros, manifestaciones y alguna ocupación episódica de fincas en protesta por la implantación del subsidio de desempleo agrario y en coincidencia voluntaria con la manifestación contra la reconversión. Las cifras son discrepantes: según CC OO, hubo 87 localidades implicadas; según la Delegación del Gobierno en la comunidad autónoma andaluza, participaron menos de 15.000 personas en 57 pueblos.

Por último, la patronal madrileña logró reunir ayer a más de 2.000 empresarios, que profundizaron en las críticas a la política económica general del Gobierno -y a la financiera en particular-, que ya había iniciado el pasado martes Carlos Ferrer Salat, presidente de la cúpula patronal. El presidente de los empresarios madrileños, José Antonio Segurado, calificó a esta política de "plan de estabilización de caballo, de la mano de una política monetaria restrictiva". La intervención de Rafael Termes, presidente de la patronal bancaria, causó división de opiniones al hablar de la solidaridad de la banca con la empresa. Dos empresarios gritaron "¡Arriba España!" al final del acto, que concluyó con la interpretación del himno nacional.

Páginas 41 y 43