El general de división Ramón Valverde acometerá con Juan Cano Hevia la reforma de los estudios militares

El general de división Ramón Valverde Martínez, cuyo nombramiento como nuevo director de Enseñanza del Ejército fue publicado ayer en el Boletín Oficial del Estado, colaborará con el teniente general Juan Cano Hevia, director de la Escuela Superior del Ejército, en la reforma de la enseñanza militar anunciada por el Gobierno socialista. Fuentes del Ministerio de Defensa señalaron ayer a este periódico que este mismo año se acometerá dicha reforma -"tema fundamental de este año"-, que ya arrastra varios meses de retraso respecto a las previsiones hechas por el ministro del departamento, Narcís Serra.

Valverde Martínez, de 61 años, estaba destinado hasta ahora en el Estado Mayor del Ejército. Fue profesor de la Escuela Superior del Ejército y también tuvo destinos en los ya desaparecidos Alto Estado Mayor y Estado Mayor Central. Entre otros cursos que ha realizado, figura uno avanzado para oficiales de Artillería en Estados Unidos. Según las fuentes informantes, "ya hace tiempo estaba previsto que el general Valverde accediera al cargo para el que ha sido nombrado, porque se le considera el hombre adecuado para el mismo".Actualmente, el máximo responsable técnico de los estudios encaminados a la reforma de la enseñanza militar es Juan Cano Hevia, ascendido a teniente general hace cuatro meses. Serra anunció en febrero del año pasado que se había creado una comisión de expertos para estudiar dicha reforma, con el objeto de ponerla en marcha en pocos meses. Sin embargo, aún no se ha aplicado ninguna modificación de importancia en los planes y programas de estudio de las numerosas academias militares existentes en España, extremo que ha sido puesto de relieve incluso por varios militares.

Igualmente, y a pesar de que Serra también anunció hace varios meses una reunión de los directores de academias y de expertos para analizar las necesidades más urgentes, aún no se ha celebrado esa reunión y, según dijeron ayer las fuentes informantes, tampoco existe una fecha concreta para mantenerla.

Prudencia de Serra

En opinión de fuentes militares, "Serra ya ha expresado su intención de ser prudente en esta cuestión, tanto ante los militares como ante la oposición". Según esas fuentes militares, la institución militar siempre se ha mostrado especialmente sensibilizada ante los cambios profundos en los planes de enseñanza, ya que de ellos depende el futuro profesional de los militares. Respecto a la oposición, cabe recordar que, en los correspondientes debates parlamentarios, Jorge Verstrynge valoró negativamente el hecho de que la nueva Ley Orgánica de la Defensa incluya entre las competencias del ministro de Defensa las de aprobar y supervisar los planes de enseñanza.

La reticencias a las modificaciones profundas en los planes de estudio han originado en ocasiones fuertes desfases. Un teniente coronel de Caballería recuerda, por ejemplo, que él estudió en la academia la utilización de la lanza, cuando en EE UU, en academias análogas, se estudiaba ya el misil.

La reforma de la enseñanza militar abarcará desde la formación del soldado hasta los cursos de generales. Defensa pretende determinar cuál es el general tipo, o el oficial tipo adecuado para el Ejército de España, y a partir de ello, se elaborarán los correspondientes planes y programas. Uno de los principales aspectos a determinar será la fórmula de selección de los cadetes. En la actualidad, el 60% de quienes. ingresan en la Academia General Militar son hijos de militares.

Asimismo, Defensa pretende seleccionar a los profesores más adecuados para cada centro, aspecto en el que desempeñará un importante papel el general Valverde. Es muy posible que, en un futuro próximo, algunos profesores de academias militares sean civiles. También es probable que los militares tengan que completar su formación con cursos en la universidad. El general Abel Barahona, destinado hasta hace unos meses en el Centro Superior de Estudios de la Defensa y ahora en el Ministerio de Defensa, está dedicado a estudiar sistemas de colaboración entre la universidad española y la institución militar.

Entre los todavía vagos proyectos de la reforma, también se incluye la unificación de algunos centros de enseñanza, en ocasiones para los tres ejércitos.

Para realizar los correspondientes proyectos de reforma, Serra solicitó ya hace meses a algunos de sus colegas europeos, entre ellos el francés, que le enviara los planes y programas de estudios de las academias.