14 empresas garantizarán el 79% de los objetivos del Plan Electrónico, afirma Solchaga
Catorce empresas multinacionales y nacionales, con las que está negociando o va a negociar acuerdos la Administración, garantizarán el cumplimiento del 79% de los objetivos del Plan Electrónico e Informático (PEIN), que el miércoles fue aprobado por el Consejo de Ministros, según afirmó en conferencia de prensa el titular de Industria y Energía. Carlos Solchaga, que no quiso desvelar los nombres de estas empresas ni las inversiones del plan, calificó el proyecto de realista y de documento orientador de la política industrial del sector.
Carlos Solchaga dijo que en el PEIN se había querido evitar una planificación dirigista, y se había optado por una filosofía liberal de configurar un marco de medidas económicas y administrativas que favorecieran el desarrollo de iniciativas privadas. Se refirió en este punto a las enormes inversiones que se requieren en este sector para investigación y desarrollo, y en consecuencia a la necesidad de evitar utopías de pretender una fabricación 100% española en todos estos productos. Insistió en la necesidad de las multinacionales siempre que se comprometan a exportar una parte importante de su producción.Al margen de estimaciones sobre la evolución del consumo aparente, producción y exportaciones, y de negar que estemos ante un documento voluntarista, Carlos Solchaga ofreció escasos datos concretos del plan. Los apoyos financieros de este plan, cuyos objetivos se concretan en 1987, no son muy cuantiosos: 25.800 millones en crédito oficial para inversiones; 53.100 millones para ayudas a la exportación y al establecimiento de redes comerciales en el exterior, y 17.000 o 18.000 millones -todavía no está decidido- en dotaciones para, investigación y desarrollo de productos.
El ministro manifestó, asimismo, que el plan aprobado exige una serie de acciones y normativas que habrán de adoptarse en los próximos meses: hay que modificar el sistema de compras públicas para que sea más coordinado y sirva al desarrollo del sector; hay que elaborar una ley de medidas y órganos de apoyo a la investigación, innovación y tecnología; hay que modificar la consideración del software (programación) para convertirlo en un active fijo; hay que arbitrar beneficios de interés preferente para instalación de nuevas empresas o ampliación de las ya existentes, y desgravar a las exportaciones por compensación de impuestos de gravámenes internos.
Presentación al Congreso
A la vista del anuncio de remisión del documento al Congreso, de la falta de datos concretos sobre inversiones y sobre las 14 empresas que presuntamente garantizarán el cumplimiento del 79% de los objetivos, y sobre el amplio abanico de acciones y disposiciones por adoptar, el ministro fue interrogado sobre la fecha en que iba a entrar en vigor el plan. Solchaga precisé que le interesaba el respaldo de las Cortes en cuanto que el plan contempla importantes inversiones y configura grandes líneas, del futuro industrial, y que por ello sería remitido al Parlamento en los primeros días de febrero.
Solchaga dijo que las dos estrellas del plan eran el desarrollo de la informática y de la microelectrónica, sector en el que una de las empresas más importantes del mundo podría instalarse en España. Negó al comienzo de la conferencia y reiteró después, a preguntas de los periodistas, que existiera ninguna relación entre la aprobación del PEIN y los avatares administrativos en que se encuentran otros proyectos inversores como el de Renfe o el Plan Cuatrienal de Telefónica. Dijo que los recortes presupuestarios en éste último tendrían incidencia, pero no importante, en el PEIN.
Al decirle que el 80% de la mano de obra del sector está ocupada en televisión y telecomunicaciones, reiteró que en estas actividades hay una escasa relación capital-trabajo ("el principal objetivo no es la creación de empleo, sino la supervivencia de puestos de trabajo a través de la utilización de técnicas avanzadas) y que lo que no podía hacerse era favorecer unas producciones como la televisión en color o productos obsoletos de telecomunicación creando artificialmente mercados que no existen.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.