Inusitada vitalidad de la cartelera de espectáculos de Valencia

La vitalidad de la cartelera teatral valenciana de los últimos días es una muestra elocuente de la permanente y diversificada oferta de espectáculos que caracteriza a esta ciudad desde que la cultura dejó de ser vehículo de compromiso político y se normalizó como trabajo profesional. La cita regular de autores, compañías, actores o cantantes con Valencia forma parte de los caminos abiertos por la nueva configuración autonómica. Ahora se puede prescindir del veredicto previo de la crítica de Madrid.

En Valencia se puede iniciar el triunfo de una representación, tomar el primer pulso de público o conseguir un buen aforo sin la necesidad de que la crítica madrileña haya hecho la presentación previa, porque, tras unos años de intensa actividad, existe una infraestructura adecuada de escenarios, críticos y comentaristas que dan el espaldarazo social y cultural.La imagen tópica de Valencia, tierra de artistas, tuvo su origen en el esplendor de la productora cinematográfica Cifesa, en la amplia enumeración de actores y actrices de la pantalla y del escenario, de artistas y creadores de cultura que dieron la vuelta a España y al mundo después de crecer en esta geografía. Pero la imagen se transformó en pálido reflejo de la realidad cuando la biografía de todos ellos cambió de rumbo al situar su nueva residencia fuera de Valencia por la escasa posibilidad de trabajo que sus oriundos ofrecían. En Valencia han nacido y comenzado a actuar famosos del arte que luego pasaron a ser extraños o simples visitantes de pocos días.

Tampoco es que vuelva aquel esplendor, pero se ha generalizado la confianza de que en la ciudad del Turia hay posibilidades de trabajar bien, y si existen carencias o crisis del sector, éstas surgen por las mismas causas que en otros puntos de España. Por citar el ejemplo más próximo, esta semana se puede asistir a las representaciones de María Estuardo, de Dacia Maraini, con Magüi Mira y Mercedes Sampietro (teatro Principal); Juana del amor hermoso, de Martínez Mediero (teatro Princesa); a los recitales de Sisa (teatro Valencia) y al montaje Obrint el món (sala Escalante), que forma parte del ciclo de teatro valenciano programado por esta sala de la diputación provincial.

Revista, teatro, danza

La buena respuesta de público a los nuevos espectáculos de revista y de music-hall en Madrid ya resultaba Conocida en Valencia, en donde Lina Morgan y su Hay que decir sí al amor provocó aforos considerables semanas atrás mientras el comienzo de la temporada de los teatros de la diputación revestía un inesperado éxito de Hasta aquí llegó la riada, music-hall recreado por Juli Leal.Luego, Marujita Díaz dejó una estela de plumas, Revista, revista, siempre revista, hasta que llegaron al escenario del teatro Princesa cuatro estrellas de la canción española: Carmen Sevilla, María Jiménez, Conchita Márquez Piquer y Remedios Amaya. Y para ser justos con la escena de Valencia no se puede olvidar el adelanto marcado en este género luminoso por Joan Monleón y Rosita Amores en el teatro Alkázar hace algún tiempo, cuando el interés por la revista era escaso.

Este género brillante coincide, sin molestarse entre sí, con el permanente teatro de repertorio y con los montajes de calidad de la oferta teatral de esta ciudad mediterránea. La tempestad, de Shakespeare, dirigida por Jorge Lavelli e interpretada por Núria Espert, estuvo en cartel durante las últimas fiestas en su doble versión, castellana y catalana.

La oferta teatral supone también un interés por la danza -con unas jornadas de carácter internacional-, por el mimo y las marionetas, por los espectáculos de animación en la calle y montajes infantiles -recientemente,- la pequeña pantalla ofreció Cataclowns, del Pequeño Teatro de Valencia-, que tienen su público asiduo. La sala Escalante ha retomado después de Navidad el ciclo de teatro valenciano, por el que están pasando numerosos grupos.

Esta pujanza del espectáculo tiene su origen tanto en algunas instituciones públicas preocupadas por mantener la oferta teatral como en la labor de determinadas iniciativas privadas, que pueden coincidir a corto plazo en la configuración del Centro Dramático de la Generalitat valenciana para coordinar los diferentes teatros públicos de Valencia, Castellón y Alicante en las capitales de provincia y en sus comarcas.