_
_
_
_

Los conservadores del primer ministro Schlüter, favoritos en las elecciones de hoy en Dinamarca

El Partido Conservador, que encabeza el actual primer ministro Poul Sclüter, se perfila como el más seguro triunfador en las elecciones anticipadas de hoy en Dinamarca. Esta es la principal conclusión de las últimas encuestas entre los electores, que no hacen más que confirmar resultados anteriores. De acuerdo con estos sondeos, los conservadores doblarán el número de escaños, que actualmente es de 26. Los socialdemócratas de Anker Joergensen, por su parte, siempre según dichas previsiones, perderán tres o cuatro escaños, pero, seguirán siendo el partido mayoritario del país.

La anunciada victoria de los conservadores aparece, sin embargo, mediatizada por cuanto buena parte de su crecimiento lo será a costa de los otros partidos que integran la coalición de Gobierno. Así, el Partido Centro Demócrata perdería ocho de los 15 escaños que posee, y el Liberal (Venstre), dos de los 20 actualmente en su poder.El otro partido de la coalición burguesa, el Cristiano Popular, mantendrá sus cuatro escaños. Si bien la palabra definitiva la dirá el escrutinio, los observadores políticos coinciden con los resultados de las encuestas preelectorales. Pero de todas maneras, aunque las urnas confirmen tales pronósticos, la oposición de izquierda, que incluye, además de los socialdemócratas, al Partido Socialista Popular (actualmente 20 escaños) y a los socialistas de izquierda (cinco escaños), tendrá mayoría en el futuro Parlamento.

El otro hecho a destacar en estas elecciones es la vuelta, por ahora transitoria, a la arena política de Mogens Glistrup, el abogado, de 57 años, líder del derechista Partido del Progreso, que ha sido autorizado a abandonar la cárcel durante cinco días para poder participar en la campaña electoral.

Glistrup cumple, desde agosto del año pasado, una condena de tres años y medio por un millonario fraude fiscal y por haber convertido su estudio jurídico en un centro de asesoramiento sobre cómo eludir el pago de impuestos. Tras haber sido despojado de su inmunidad parlamentaria, ingresó en la cárcel. El pasado día 4, con 22 kilos menos (dijo que la comida en la cárcel no es gran cosa) pero lleno de energías, se lanzó de inmediato en la campaña electoral con el doble objetivo de luchar por la recuperación de su liderazgo en el partido y por su propia libertad.

Por ahora, esperará en la cárcel el veredicto de las urnas, con varios botes llenos de monedas que los jóvenes del partido han recolectado para que pueda hablar ilimitadamente por el teléfono.

El Gobierno minoritario de centroderecha de Poul SchIüter decidió convocar elecciones anticipadas a mediados de diciembre pasado, después de que el Parlamento rechazara, por 93 votos contra 77, el presupuesto presentado para 1984. Los partidos de oposición consideraron que los objetivos de sanear la economía a través de la reducción del déficit fiscal, la disminución de la deuda externa y el paro, así como el aumento de las exportaciones, incluidos en el proyecto presentado, tenían un costo social tan elevado que impedía votarlo. Por su parte, el Partido del Progreso, ¡aunque por considerar que las medidas de austeridad eran demasiado suaves, votó también en contra, lo que determinó la convocatoria de elecciones.

Pero este no ha sido el único problema que ha puesto al Gobierno en dificultades. La política exterior, incluidos, naturalmente, los compromisos derivados de la pertenencia de Dinamarca a la OTAN, mantuvo al Gobierno bajo el signo de la inestabilidad. El Gobierno salió derrotado en su posición favorable a la doble decisión de la OTAN (despliegue de los euromisiles si antes no había acuerdo en Ginebra).

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_