Dirección y sindicatos comenzarán en el primer semestre de este año la negociación de un nuevo plan de reconversión para Hunosa

En el primer semestre de este año se iniciarán las negociaciones del nuevo plan de reconversión de Hunosa entre la empresa y los representantes de los trabajadores, según informaron fuentes de la sociedad minera. El plan pretende una mejora del 40% de la producción, manteniendo la actual estructura, la misma plantilla y la mecanización y automatización de los sistemas. Los resultados que se obtengan en el año 1984 determinarán, sobre estas mismas bases, su continuidad en el futuro. Si, por el contrario, no se lograra recuperar la tendencia registrada en los dos primeros años del anterior plan de reconversión -que finalizó en diciembre de 1983-, se iría al cierre de pozos y a la reestructuración total de la empresa.El aumento del 40%. de producción, según fuentes de la dirección de Hunosa, se basa en el mantenimiento de los mismos yacimientos y la misma infraestructura, la saturación de instalaciones en la producción menos costosa y de mejor calidad y una mejora de la estructura de plantillas, acompañado todo ello con continuar la mecanización y automatización iniciada con el anterior plan.

Fuentes de la dirección de Hunosa señalaron que el plan de reconversión vigente hasta diciembre pasado "era un instrumento correcto, imprescindible y válido". Y las previsiones recogidas en el mismo se cumplieron en los dos primeros años de su vigencia.

Esta tendencia, sin embargo, se quebró en 1983, año que las citadas fuentes consideran anómalo. La caída. experimentada tiene su origen en dos factores, según las fuentes citadas. Por un lado, en dos acontecimientos sociolaborales que introdujeron una importante conflictividad: la negociación del Estatuto Minero y la reducción de jornada. Y por otro lado, en que el plan incluía en sus previsiones la mecanización y posibilidades de producción del yacimiento La Moral. Sin embargo, el citado yacimiento no cumplió las esperanzas que se pusieron en él, y no ha sido posible mecanizarlo, a pesar de su calidad.

Según cálculos de la propia empresa, los conflictos acarrean unas pérdidas por tonelada entre las 16.000 y 24.000 pesetas. A ello habría que añadir que la reducción de jornada supone seis días menos de producción y 900 millones de pesetas de pérdidas.

A juicio de la dirección de Hunosa, la empresa no está en un sector en crisis, lo que la distingue de otras reestructuraciones en marcha. "Es una crisis de costes. Se produce el carbón muy caro", señalan estas fuentes, "pero si se cerrara Hunosa habría que importar todo el carbón que aporta la sociedad, y habría que importarlo para Asturias, que es donde Hunosa tiene sus clientes. Estamos convencidos que si cerráramos algún yacimiento, alguien volvería a abrirlo".

A finales del pasado verano se elaboró un primer plan para Hunosa, que no llegó a concluirse por entender, en línea con lo expresado por el ministro de Industria, Carlos Solchaga, que la sociedad minera "lo que necesitaba era un plan a largo plazo dentro del que se pudieran enmarcar actuaciones de carácter más inmediato".

Huelga de vigilantes

Más del 50% de los vigilantes del interior de las minas de Hunosa inició ayer un paro de 24 horas para protestar por lo que consideran mala gestión de la dirección y por la "retracción de autoridad" en el interior de las minas, informa Europa Press. En el primer turno de ayer, de un total de 447 vigilantes faltaron al trabajo 296.