Negociación entre Mozambique y Africa del Sur para evitar que "un país ataque al otro"
El objetivo principal de las negociaciones celebradas el pasado martes en la capital de Suazilandia, Mbabane, entre miembros de los Gobiernos de Mozambique y África del Sur, es, según el presidente mozambiqueño, Samora Machel, evitar que "un país ataque al otro".
El clima de enfrentamiento entre el régimen racista blanco de Pretoria y su vecino regido por mayoría negra ha pasado en los últimos meses de las palabras a la violencia pura y simple, con ataques de las fuerzas armadas surafricanas, dirigidas, oficialmente, contra las bases de la guerrilla del Consejo Nacional Africano (ANC), que combate la política de apartheid, informa desde Maputo Antoni CastelEn el encuentro participaron el ministro mozambiqueño de la Presidencia, Jacinto Veloso, y el titular de Exteriores surafricano, Roloef Pick Botha. También estuvieron presentes representantes del Gobierno de Suazilandia.
Portugal ha desempeñado un importante papel en la preparación de las negociaciones. El presidente mozambiqueño visitó oficialmente Lisboa hace poco más de un mes, y Pick. Botha lo hizo dos veces en el plazo de una semana, a principios de diciembre.Samora Machel aseguró en Bissau, donde asistía a una cumbre de países africanos de lengua portuguesa, que se trata de la apertura formal de negociaciones con vistas a la normalización de las relaciones entre Mozambique y África del Sur en todos los dominios, que deberán incluir "la no instalación de bases de combatientes en ninguno de los dos países"., informa desde Lisboa Nicole Guardiola.Machel dijo que sabía "de antemano" lo que iba a exigir África del Sur, pero no especificó las exigencias de Pretoria; en cambio, fue muy claro acerca de las condiciones puestas por Mozambique: "No nos obliguen a reconocer los bantustantes, no nos obliguen a aprobar el apartheid, no nos obliguen a asesinar el ANC".Samora Machel dijo también que las negociaciones abordarían el problema de la situación de cerca de 3.500 combatientes de la guerrilla de la Resistencia Nacional Mozambiqueña (RMN) capturados por las tropas regulares de Maputo y anunció que se encuentran ya en Mozambique miembros de la Cruz Roja Internacional, que serán los encargados de su evacuación.Las acciones de la RMN han contribuido a agravar la precaria situación económica de Mozambique, y no existen dudas en Lisboa acerca de la manipulación por los servicios secretos surafricanos.
Acusaciones mutuas
Pretoria acusa a Mozambique de albergar a la guerrilla del ANC, y a Suazilandia de permitir que su territorio sea usado como zona de tránsito de los miembros de la organización nacionalista negra. Los dos países dicen que se limitan a permitir que su territorio sea santuario para quienes huyen del sistema de segregación racial de Suráfrica, pero que prohíben que estos refugiados realicen actividades subversivas. Maputo acusa a su vecino surafricano de favorecer la lucha de los rebeldes contra su Gobierno, lo que Pretoria niega.Fuentes informadas en Mbabane aseguran que 11 miembros del ANC fueron detenidos la pasada semana en Suazilandia, pero no pudieron especificar si la medida estaba relacionada o no con las negociaciones con África del Sur, país del que, según una fuente surafricana, citada por Reuter, han sido expulsados al menos tres miembros de la guerrilla mozambiqueña en los últimos días.
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