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La Guardia Civil investiga supuestas relaciones de anarquistas catalanes con las Brigadas Rojas

La Guardia Civil de Barcelona ha iniciado una investigación para descubrir las posibles conexiones de las Brigadas Rojas con el movimiento libertario de Cataluña. El caso se abrió hace nueve días cuando cuatro jóvenes fueron detenidos en el puerto de Génova (Italia), llevando gran cantidad de propaganda terrorista. Uno de los detenidos, Fabrizio Brutet, vecino de Turín de 21 años de edad y militante de las Brigadas Rojas, tenía sobre sí una orden de busca y captura, al haber quebrantado desde hacía meses su libertad provisional y no haberse presentado periódicamente al juez.

Todo empezó en la tarde del 25 de noviembre. Los pasajeros y los vehículos habían empezado a ser embarcados en la nave Drotten, que los conduciría a Barcelona. Faltaban dos horas para que el barco abandonase el muelle de Génova, cuando un grupo de carabineros y de policía de paisano detuvieron a los jóvenes Fabrizio Burtet y Miguel Valduci, el primero de nacionalidad italiana, el segundo, español. Ambos esperaban el turno para introducir su furgoneta en las bodegas del barco. Pocos minutos más tarde, en el mismo muelle, serían detenidas la súbdita francesa Brigitte la Barrière y la española María del Carmen Duarte Ortíz, compañeras de los dos primeros.Después de permanecer en la Jefatura Superior de Policía, los cuatro detenidos fueron ingresados en prisión, acusados de propaganda ilegal y de asociación ilícita. Los cargos están siendo investigados por el ministerio fiscal, mientras la Guardia Civil y la Policía iniciaban en Barcelona una labor de rastreo procurando averiguar los antecedentes y las relaciones de los cuatro jóvenes.

El turinés Fabrizio Burtet, militante de las Brigadas Rojas, llegó por primera vez a Barcelona la pasada primavera, interrumpiendo las órdenes de presentación ante el juez decretadas a raíz de su libertad provisional. Acompañado siempre de Brigitte la Barrière, el joven italiano trabó amistad con una pareja española, Miguel Valduci y María Duarte del Carmen, vecinos de la calle Montes. Por aquella época, Miguel trabajaba en el bar de su padre, mientras su compañera lo hacía como peluquera.

Productos naturales

Poco antes del verano, los cuatro jóvenes decidieron adquirir una masía en las cercanías de Vinaroz (Castellón), donde cultivaban la tierra y se dedicaban a elaborar y comerciar con conservas y productos naturales.Poco antes de finalizar el mes de agosto los cuatro jóvenes decidieron trasladarse al sur de Francia y aprovechar los altos salarios que se pagan durante la vendimia. Una vez finalizada la recolección, prosiguieron viaje hacia el norte de Italia, desde donde se disponían avolver a España y regresar a Vinaroz.

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La idílica trayectoria de estos cuatro jóvenes, que fue explicada a este periódico por sus propios familiares, se contradice con esas docenas de kilogramos de propaganda terrorista encontrados en el interior de su vehículo. Millares de octavillas sobre las Brigadas Rojas se amontonaban junto con libros didácticos de la guerrilla urbana, traducidos al castellano y dispuestos, al parecer, a ser distribuidos por España.La Guardia Civil ha empezado a investigar las actividades de los cuatro jóvenes y su supuesto campo de actividades políticas. En medios policiales no se descarta la posibilidad que desde su masía en Vinaroz se dedicaran a planear actividades terroristas. Por ahora no hay nada concreto. Sólo un telegrama urgente cursado desde el Ministerio del Interior ordenando llegar al fondo del caso. Hay también esa docena de kilogramos de propaganda terrorista y una orden de prisión provisional decretada por el juez de Génova.

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