Juan Pablo II rechaza un gesto reconciliador hacia los divorciados y los sacerdotes casados
Juan Pablo II no ha aceptado la sugerencia de la mayor parte de los obispos reunidos en el Sínodo para que hiciese un gesto espectacular con dos grupos de cristianos que viven su fe en situación irregular: los divorciados y los ex sacerdotes a quienes todavía no se les ha concedido la dispensa de matrimonio y han formado ya un hogar al margen de la legalidad católica.
Este gesto de reconciliación con esa parte de cristianos que viven en la irregularidad fue pedido al Papa por el 75% de los miembros del Sínodo, exactamente por nueve de los 12 grupos de trabajo, según noticias de buena fuente recogidas por EL PAIS. Pero la respuesta de Juan Pablo II ha sido negativa. Más aún, les ha rogado a los promotores de la iniciativa que no continuaran en esta línea, ya que, de este modo, dijo, "me obligan a mí a apretar siempre el freno". Y añadió: "Imagínense si los periodistas conociesen esta petición de ustedes".Según uno de los padres sinodales, el papa Wojtyla quiere para la Iglesia de hoy un mayor empeño de santidad y una disciplina más severa en el interior de la misma.
Mientras tanto, ha causado honda impresión en el Vaticano el hecho de que un diario como La Croix, el periódico católico más famoso del mundo, se ha, a permitido publicar dos páginas enteras sobre los cinco años (le pontificado de Juan Pablo II, con juicios muy negativos sobre las actuaciones del papa Wojtyla.
"Catolicismo de restauración"
La cumbre del episcopado francés ha deplorado el hecho con un telegrama enviado a la dirección del periódico y a la Secretaría de Estado del Vaticano. En la información del rotativo francés, publicada como resultado de una mesa redonda, Juan Pablo II es acusado de "resolver los problemas de la Iglesia de manera demasiado polaca", de "favorecer un catolicismo de restauración y de barricadas", de "vuelta atrás respecto al concilio" y de poseer una, visión "arcaica" de ciertos problemas, como, por ejemplo, sobre el papel de la mujer en la Iglesia.Esta tarde, Juan Pablo II se trasladará desde el Vaticano al Pontificio Colegio Español para celebrar una misa y cenar con setenta sacerdotes y seminaristas españoles, que están en Roma perfeccionándose en diversas disciplinas religiosas en las universidades eclesiásticas. El motivo de esta fiesta es conmemorar el primer aniversario de la visita de Juan Pablo II a España. Con este objeto ha llegado a Roma una delegación de obispos españoles, que celebrará en San Pedro una adoración nocturna.
