_
_
_
_

El PSOE estuvo a punto de impedir el ingreso de España en la OTAN, según el ex ministro Pérez-Llorca

"Es muy probable que hoy estuviéramos todavía fuera de la Alianza Atlántica si el Gobierno de Leopoldo Calvo Sotelo no hubiese ordenado a su embajador en Washington, el domingo 30 de mayo de 1982, que depositara con urgencia en la Secretaría de Estado los documentos de ratificación de España al Tratado de Adhesión a la OTAN", dijo ayer José Pedro Pérez Llorca, en su primera intervención pública desde que dejó el ministerio de Asuntos Exteriores como último titular del departamento durante el mandato de Unión Centro Democrático. Según Pérez Llorca, el Partido Socialista Obrero Español estuvo entonces a punto de impedir, desde la oposición, el ingreso de España en la Organización del Tratado Atlántico Norte.

"En la reunión de la junta de portavoces del Congreso prevista para el lunes siguiente, a las 10 de la mañana, el PSOE tenía los votos necesarios para reabrir el debate parlamentario sobre el ingreso de España en la OTAN y, lo que es peor, yo estaba seguro de que tenía los votos de un número suficiente de diputados de nuestro propio partido para haber ganado la votación en contra, en ese debate", añadió Pérez Llorca. Fuentes socialistas consultadas no quisieron comentar esta afirmación del ex ministro de UCD, y algunas se mostraron escépticas al respecto.El ex ministro de Asuntos Exteriores hizo esta revelación en el curso de su participación en el seminario que sobre España, Europa, Occidente: Una política integrada de seguridad ha celebrado el jueves y el viernes en Madrid la fundación alemana Konrad Adenauer. "A esto se refiere ahora el Gobierno socialista cuando habla de que nosotros metimos a España en la OTAN precipitadamente. Dentro de UCD el tema se venía pensando y debatiendo desde junio de 1977, y en 1981 el debate en las Cortes duró 12 días. Ha sido el debate más largo que se ha celebrado en el Parlamento desde la democracia. En eso no hubo ninguna precipitación", afirmó Pérez Llorca.

Tres alternativas

En esa fecha, la totalidad de la prensa española comentó la oportunidad y precipitación de la adhesión en domingo. Lo relacionó con el hecho de que era el día de las Fuerzas Armadas y, asimismo, con la proximidad de la divulgación de la sentencia sobre el intento golpista del 23 de febrero. Para Pérez Llorca, los intentos del PSOE por reabrir el debate desde que el 30 de octubre de 1981 el Congreso votó 186 a favor y 146 en contra, se dirigieron a retrasar la ratificación de Grecia, la única que faltaba de la organización, y que tenía que producirse antes de que España pudiera depositar los documentos en Washington. "Efectivamente, Grecia fue el último país en ratificar el ingreso de España en la OTAN y su decisión llegó cuando ya sabíamos que el PSOE tenía prácticamente conseguido su propósito. Por eso en cuanto Regó la ratificación de Atenas y a pesar de ser domingo tuvimos que acelerar el proceso", comento Pérez Llorca.Para el ex-ministro de Asuntos Exteriores, la decisión en el seno de UCD de metera España en la Alianza se tomó en el momento en que se llegó a una "encrucijada necesaria e histórica" con la renovación del Tratado bilateral con los Estados Unidos que expiraba en 1981. Las tres alternativas que se planteaban eran la de abandonar el esquema de 1953 y cesar la relación bilateral lo que nadie defendió, ni siquiera en la oposición", o bien una alternativa continuista, que suponía seguir en el aislamiento de Europa, "lo que no tenía sentido puesto que ya eramos una democracia". La tercera opción implicaba entrar en la Alianza y mantener un convenio auxiliar de defensa con Estados Unidos.

En el debate sobre la integración militar de España en la OTAN, que cerró el seminario de la fundación Konrad Adenauer, el teniente general en la reserva, Manuel Díez Alegría, dijo que la contribución a la defensa occidental ayudaría a una mayor profesionalidad de los ejércitos españoles y a una mejora de la capacidad defensiva de España. Javier Rupérez, que actuó en el tema en sustitución del general Eduardo Munilla, cuyos superiores no autorizaron su participación, dijo que la congelación de la integración española "deja sin precisar y definir la política de defensa y repercute en la política militar". Para el ex-ministro de Defensa portugués, Luis Azevado Coutinho, la salida de España de la Organización del Tratado Atlántico Norte sería grave para España, para la Alianza y para Portugal.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_