Life Specials funciona de nuevo en Madrid, a los seis meses de ser desarticulada por la policía y detenidos 21 ejecutivos
La empresa de cosméticos y perfumería Life Specials está funcionando de nuevo en Madrid, a los seis meses de haber sido desarticulada por la Policía y haber sido detenidos 21 de sus ejecutivos. El domicilio social se encuentra en el edificio Parking, situado en la plaza de los Mostenses, tercera planta, oficina 39. El sistema de captación de vendedores se realiza por medio de anuncios en la Prensa, y se aplica el sistema conocido como la pirámide, que medios policiales consideran penalmente tipificado como estafa. La Brigada Regional de la Policía Judicial ha tenido conocimiento del renacimiento de la firma y lo ha comunicado al juzgado que instruye el sumario, aunque aún no se ha ordenado suspender la actividad de la misma.
Las denuncias que originaron las actuaciones policiales y judiciales en el pasado mes de marzo se basaron en que los productos de perfumería, entregados por la empresa a cambio de las aportaciones económicas de los vendedores, carecían prácticamente de valor y no tenían el menor apoyo publicitario, por lo que su venta era imposible. La única forma de recuperar el dinero entregado consistía, por tanto, en alimentar la pirámide y buscar nuevos candidatos que entregaran más dinero. Por este procedimiento, la firma había conseguido de unas 7.000 personas más de 467 millones de pesetas, según informó la policía.Desde la apertura de las nuevas oficinas, numerosos parados deseosos de mejorar su situación concertan a diario una entrevista para someterse a algo que puede asemejarse al timo de la estampita. En la tercera planta de un moderno edificio de oficinas, los representantes de la empresa de "alta cosmética" reciben a los candidatos, no sin antes avisar, si el interesado es varón, que vaya con traje y corbata. "Nada de vaqueros ni otras excentricidades; esto es una empresa seria".
Los candidatos, casi todos ellos personas sin trabajo, acuden a la cita previo contacto con un iniciado, y se le somete a un interrogatorio sobre sus aspiraciones. La oficina tiene como único mueble un mostrador donde se exhiben los productos de la línea cosmética Sky Line. En sillas y pupitres colegiales se realizan las entrevistas, donde se entremezclan preguntas acerca de las cantidades de dinero que se aspira a ganar y los recursos económicos del invitado.
Ganadores y perdedores
En una reunión íntima, a la que sólo asisten aquellos que quieren "transformar sus sueños en realidad", el director de la compañía ofrece una charla moral y filosófica a los neófitos sobre las múltiples ventajas que tiene pertenecer a Life Specials. El contenido ideológico del reducido cursillo se basa en la división del mundo en dos clases de individuos: los ganadores y los perdedores. "Si ustedes quieren estar entre los primeros, aquéllos a los que todos admiramos porque han tenido éxito en la vida, los ejecutivos, los empresarios... personas que en su día tornaron una decisión y se arriesgaron", afirma el director, apellidado García, "no lo duden; apúntense a Life Specials".
Presión psicológica
La confusión mental entre los asistentes al cursillo, que han acudido excepcionalmente arreglados para causar mejor impresión, es notable. "Entre la gente de éxito y los que no triunfan, tan sólo hay una diferencia, y es que aquéllos toman decisiones y se comprometen a triunfar, y la gente que fracasa nunca se compromete consigo misma". La presión psicológica no ha terminado: "No sólo distribuimos productos de alta cosmética en España; nuestras redes se extienden por todo el planeta. El sol no se pone para los distribuidores de Life Specials. Somos como un tren y ya no hay quien nos pare. El triunfo está con nosotros".
Cuando su exposición ha terminado, otro representante de la firma comercial explica a una velocidad supersónica el plan de mercado, que consiste en unas estudiadas "cuatro posiciones básicas". La primera es la de presentador de ventas, para lo que hay que realizar una inversión de 5.000 pesetas. La posición superior es la de distribuidor de ventas, a la que se accede abonando 130.000 pesetas, por las cuales se recibe un surtido inicial de productos. La labor del distribuidor consiste en crear redes al por menor, a base de presentadores. La tercera posición es la del organizador, a la que se puede acceder aportando 160.000 pesetas, por las cuales se reciben 200.000 pesetas en productos a precios base. La posición más alta en el plan de mercado es la de coordinador, que tiene el 60% de descuento y recibe el 10% de beneficios sobre todos los organizadores de ventas.
A continuación, cada invitado al cursillo es atendido individualmente por la persona que le ha introducido en la empresa. "¿Cuál es la posición que cree usted que le conviene mejor?", pregunta el iniciado. "Pues por mi situación económica, creo que sólo puedo aspirar por el momento a la distribución de ventas", responde el invitado. "¡Estupendo! ¿Cuál es su nombre y dirección?, ¿cómo lo va a formalizar, en cheque o en efectivo?"
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