Enamorados de la moda juvenil

Con el recuerdo de las vacaciones recién terminadas aún fresco en la memoria, con el bañador aún húmedo y casi listo para guardar hasta el año próximo y con un calor que parece mentira en estas fechas del recién estrenado otoño, los. casi seis millones de alumnos españoles han cambiado sus divertidos y alegres atuendos veraniegos por el uniforme del cole. Dispuestos a recibir los fríos vientos del invierno que se aproxima, a lo mejor sueñan con las vacaciones del verano que viene, que en estos momentos parece un futuro demasiado lejano.Pero si hubiesen asistido a la Feria Internacional de la Moda Infantil-Juvenil (FIMI) que se celebró los pasados días 15 a 18 de septiembre en Valencia, quizá se hubiesen animado a ver lo que los fabricantes de moda joven han preparado para la próxima temporada primavera-verano 1984. Este salón, único en su especialidad en España, es de carácter profesional, y en él se han reunido unos 107 expositores nacionales (43% de Valencia, 28,97% de Cataluña, 11,21% de Madrid y 16,82% del resto de España), ocupando unos 170 stands para ofrecer a los 2.370 compradores nacionales y los 158 compradores extranjeros, procedentes de diversos países -una moda que incluye desde prendas de bebé y, de artesanía -30 expositores- a prêt-à-porter -77 expositores-, incluyendo calzado infantil. Este salón tiene como objetivo primordial promocionar la exportación e intenta atraer al comprador extranjero a base de calidad de diseño y moda, y no por precio barato.

Realmente, existía una buena oferta de moda que contaba con una línea coordinada de cuatro tendencias generales en cuanto a colorido, formas, estilo, etcétera que se ha dividido en: trópicos, Disneylandia, construcciones y Mediterráneo. Trópicos está inspirada eníprendas coloniales, tanto militares, con pantalones voluminosos, grandes bolsillos con fuelles en tonos neutros caqui y arena y estampados camuflaje y batik, como de los nativos, con estampados de flores tropicales peces, hojas, pájaros, en colores vivos y todos en algodones y sar gas de formas desestructuradas y con drapeados. Disneylandia: basándose en una mezcla entre Disneylandia y los Juegos de la Olimpíada de Los Ángeles del verano de 1984 se ha creado una moda, deportiva y de fantasía a la vez, donde destacan anagramas olímpicos, superposición de shorts sobre pantalones, o cami seta escotada encima de camise ta clásica, con colores ácidos, estampados multicolores de temas olímpicos en popelines, félpas, rizo, rejilla, jeans y chambray. Construcciones: inspirada en prendas de trabajo funcionial, dejando el romanticismo aparte, lleva formas simples y geoirnétricas con pocos adornos, predominando colores lisos y suaves conblanco como base, seguido del crudo y marino, además de. combinación de blanco con colores vivos, incluyendo estámpados de rayas y cuadros, imitando e structuras geométricas en lonetas, popelines y gabardinas. Mediterráneo: dando énfasis a temas náuticos y marineros, utiliza colores tradicionales, como azul marino, rojo, blanco, además del amarillo y naranja, para coordinar con el blanco o crudo, empleando motivos marineros destacando pantalón recto y tobillero, ancho en los bajos, y sustituyendo las cremalleras y botones por ojales abrochados con cordones en percales, sargas y popelines.

Todas estas tendencias se Podían apreciar en la pasarela donde desfilaron, bailando a toda marcha, unos 50 niñas y niños de todas las edades, desde alguno alguno con chupete hasta unas auténticas discotequeras de 10 años.

Diseños de vanguardia

Algunas de las firmas que merecen especial mención por su diseño original de vanguardia son: Tutti Frutti, una de las martas más importantes en rama infan til, tanto fuera como dentro de nuestras fronteras, que presentó temas originales de cinema -camisetas estampadas con cáma ras, cine, claquetas, flash en celeste- amarillo pálido, caramelo, blanco y negro-, dancing -con motivos de instrumentos musicales, discos, notas en camisas, pantalones tobilleros en mauve, salmón, turquesa y gris- y flúor -luz fluorescente a base de colores electrificantes: amarillo, verde, azul y naranja, evocando el graffiti americano de los años cincuenta-; Sing-Sing, de diseño con marcada influencia japonesa, utilizando pantalones an chos y cortos, estilo yudo, con canusas anchas y estampados de letras chinas, empleando combinación de gris, negro y blanco; Il Giardino, especializada en niños de seis meses a ocho años, utilizando fondos blancos y estampados exclusivos en cuatro colores vivos -verde lima, rosa fuer te, azuI brillante, amarillo cana río- de surfing, palmeras, nativos, peces; Edi-Petit's toca tema safari, con bermudas, saharianas y camisetas a juego; Hippopotamus, con sus bañadores, camisetas y toallas y juego, y Goofy, que emplea bicolores, como rosa con azul claro, verde con amarillo, para pantalones abombachados con punto en to billos y cazadoras a juego.

Se echaba de menos firmas tan destacadas como Bamboo , una de las primeras marcasinfantiles, que ya tiene cubierta venta nacional, y echa ojos al extranjero, o Buggui-Back, con sus estampados tan originales. Lo que sorprendía era ver tantos compradores de países árabes en los stands de los vestidos para comunión. Y resulta que países como Kuwait y Arabia Saudí son buenos clientes de este tipo de confección. No es que se estén convirtiendo al catolicismo, sino que por las características de estos vestidos -mangas largas, faldas largas, que cubren brazos, piernas, hombros, etcétera-, son ideales para las niñas que son acompañantes de la novia en las bodas cuya celebración puede empezar una semana antes de la boda, y con cambios diarios de vestido; o también para la fiesta religiosa que se celebra cuando las niñas de 12 o 14 años han terminado de estudiar el Corán; o para los tres días de la fiesta Ied el Fetr, que se celebra después de terminar el mes de ayuno del Ramadán. En todo caso, es mercado interesante.