Las bases de AP piden más dureza a su grupo parlamentario
Los militantes de Alianza Popular consideran que la oposición realizada hasta el momento presente no ha sido suficientemente dura. La corriente interna de Afianza Popular, según la cual no se atacan a fondo los planteamientos socialistas, está contrarrestada por la opinión de quienes estiman que el PSOE ha corregido su rumbo. Para Verstringe, "los supuestos del PSOE no son los nuestros, pero hemos observado que están en unos planteamientos más realistas que teóricos. No obstante, con algunos problemas han contemporizado y eso no es permisible".En la política que se sigue en el Parlamento, el Grupo Popular admite que la mecánica de los números manda, pero se siente dolido por el pase sistemático de la apisonadora de los escaños socialistas. De las 500 enmiendas presentadas a los Presupuestos Generales del Estado ni una sola logró pasar el tamiz socialista. "Aunque fuera por elegancia", dice Verstringe, "podían haber admitido alguna. Esta actitud nos obliga a plantear temas al Parlamento y a la opinión pública directamente, dada la dificultad que existe para que nuestras sugerencias sean tenidas en cuenta".
Una de las grandes esperanzas del Grupo Popular radica en la posibilidad de que sea declarada inconstitucional la fórmula que se siguió para la expropiación de Rumasa. La reciente sentencia sobre la LOAPA ha sido considerada un éxito particular de Alianza Popular. Con el caso Rumasa se aguarda un resultado similar. Para el Grupo Popular, la sentencia del Tribunal Constitucional ha coincidido plenamente con su postura, en el sentido de que el problema fundamental radicaba en el Título Primero y que lo demás era puro acompañamiento. La LOAPA, se entiende en medios aliancistas que no tenía ni tiene posibilidad alguna de aplicación. El debate concreto sobre el tema deberá plantearse en su día en la reforma del artículo 149 de la Constitución para fortalecer los poderes del Estado. Una reforma constitucional no está, sin embargo, en los objetivos primarios de la oposición. La teoría sobre temas autonómicos se fundamenta en el deseo de que se realicen las transferencias máximas lo antes posible, pero sin retrasos injustificados como es el caso de Galicia. El punto de partida del traspaso de transferencias autonómicas se lo plantea el Grupo Popular desde el desarrollo de las competencias del Estado.
Entre determinados miembros de AP existe cierta crispación con el tema de las ocupaciones de fincas en Andalucía. Según los informes del partido, ninguna de las fincas que reclaman los jornaleros andaluces está abandonada o insuficientemente explotada. AP exigirá al Gobierno que cualquier medida que se tome se haga de acuerdo con la ley, y que el inismo criterio que se aplique para Andalucía sea el que presida las medidas que puedan adoptarse en otras regiones.
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