Nerviosismo y esperanza en la reunión de cancilleres de Centroamérica y Contadora

Como una cita básica para el proceso de pacificación de Centroamérica ha calificado el canciller de Venezuela, José Alberto Zambrano, la nueva ronda de conversaciones iniciada el miércoles en Panamá por el grupo de Contadora. En ninguno de los encuentros anteriores se registró un clima de esperanza tan definido como en esta ocasión, aunque las declaraciones previas de los ministros revelan también un cierto nerviosismo por la urgencia de llegar a acuerdos operativos.Si no se traspasa el umbral de la buena voluntad, el foro de Contadora corre el peligro de diluirse en retórica. La tentación de recurrir a la OEA (Organización de Estados Americanos) podría ser entonces muy fuerte para Gobiernos como los de Honduras y Costa Rica. Esto supondría un retroceso, por la desconfianza que la institución panamericana merece: a Nicaragua, debido al control que Estados Unidos ejerce sobre ella.

La conferencia de los cuatro cancilleres de Contadora con sus cinco colegas centroamericanos dio comienzo con una cena protocolaria, que sirvió para presentar a los nuevos ministros de Panamá, Oyden Ortega, y Guatemala, Fernando Andrade. Este se presentó con unas declaraciones de apoyo sin reticencias a este foro, tratando sin duda de disipar los juicios críticos emitidos por su presidente. Ortega aclaró igualmente que la política exterior de su país no sufrirá variaciones. Con ello tranquilizaba a los Gobiernos más conservadores de la región, un tanto incómodos por su trayectoria personal de izquierda. El nuevo canciller se compromete a seguir la línea de su antecesor, que se definió por un acercamiento pronorteamericano.

A diferencia de otros encuentros que se convocaron con agenda abierta, esta vez los cancilleres centrarán sus debates en tres documentos fundamentales: la declaración emitida en Cancún (México) por los cuatro presidentes del grupo de Contadora, la propuesta de paz presentada en Managua por el comandante Daniel Ortega y el documento conjunto dado a conocer en la última reunión por los cancilleres de Guatemala, El Salvador, Honduras y Costa Rica.

Está previsto que la conferencia termine hoy por la noche, aunque podría prolongarse mañana. Sobre los tres textos citados deben hacer una plataforma de pacificación aceptada por todos, así como el nombramiento de cuatro grupos de trabajo que deberán proponer convenios específicos en materia política, militar, económica y de vigilancia internacional. Todos presienten que a Contadora le ha llegado el momento de la verdad y esto genera algún nerviosismo.

"Tenemos esperanzas de que en esta ocasión se llegue a soluciones más concretas que en las anteriores, ya que el tiempo pasa y Centroamérica necesita paz", dijo el ministro costarricense, Fernando Volio. Su colega hondureño, Edgardo Paz, que reafirmó la voluntad pacifista de su Gobierno, añadió que "Nicaragua puede ser muy útil para buscar la paz, si trabaja con seriedad en esta reunión".

El ministro nicaragüense de Relaciones Exteriores, Miguel d'Escoto, declaró que acude a esta nueva cita "con ánimo pacífico y conciliador, basado en los ocho puntos que nuestro Gobierno propuso desde julio pasado".