El economista Franco Modigliani elogia la política de Felipe González y Miguel Boyer
La flexibilización del mercado de trabajo y la reducción de los costes salariales son dos condiciones necesarias para la recuperación de la economía española, según declaró ayer Franco Modigliani, prestigioso economista del Masachussetts Institute of Technology, al término de su intervención en el VII Congreso Mundial de Economía. Modigliani, para quien sus colegas vaticinan el futuro premio Nobel de economía, elogió de forma decidida la política económica anunciada por del presidente español Felipe González y por el ministro Miguel Boyer.Las palabras del presidente y de su ministro de Economía, según Franco Modigliani, reflejan un conocimiento de que la recuperación económica española pasa por eliminar la actual situación de inmovilidad laboral y de altos costes salariales. "Yo deseo que sus programas de flexibilización del mercado laboral y reducción de los salarios reales logren el apoyo del Parlamento y de las fuerzas sociales".
Modigliani, a quien se considera próximo a las teorías liberales de la Escuela de Chicago, cree que la situación de la economía española es muy similar a la de Italia (alta tasa de inflación, fuerte desempleo, excesivo coste de la mano de obra que desalienta la contratación e incide negativamente sobre la competitividad internacional, y todo ello reforzado por la ineficacia que aporta al sistema la inmovilidad laboral). La inmovilidad laboral es aún más grave en España que en Italia, a juicio del economista, porque mientras en este último país se deriva de la contratación, en España está refrendada por las leyes. Por el contrario, Italia tiene un problema adicional que es el déficit de inversiones, que es más grave que en España.
Reactivación económica
No obstante Franco Modiglini, que sostiene unas tesis optimistas sobre la recuperación de la economía mundial ("confío que en seis meses empezará a notarse"), manifiesta una gran confianza en las posibilidades de ambos países -España e Italia- para superar la crisis. "La receta económica que yo les daría es que se preparen y adopten políticas monetarias y fiscales que adelanten sus recuperaciones internas a la recuperación, general de las exportaciones y del comercio mundial, que en breve va a producirse. Con ello se beneficiarían más de los efectos positivos que va a tener la recuperación del comercio mundial sobre los distintos países".El economista del Masachussetts Institute of Technology, que reconoce que se ha vivido la mayor recesión económica desde, la segunda guerra mundial, piensa sin embargo que este situación está próxima a acabar. Ha sido un período largo, afirma, pero creo en los ciclos y pienso que pronto se va a volver a una situación de normalidad. "La política restrictiva de Estados Unidos para reducir la inflación, con altos tipos de interés y fuerte déficit se ha acabado. Se está invirtiendo ya. En breve tiempo se dará una coyuntura favorable para que los países fuertemente endeudados en la actualidad puedan mejorar, mediante el descenso de los tipos de interés, y sumarse con su demanda al crecimiento del, comercio y a la recuperación de la economía mundial".
La política norteamericana va a cambiar, a juicio de Modigliani, porque hay una gran preocupación por el déficit "y no creo que ningún candidato a la Casa Blanca pueda presentarse a las próximas elecciones con un enorme déficit en su programa". Con respecto al déficit de Estados Unidos, Modigliani rechaza las acusaciones a los gastos militares como principales culpables del mismo. "Yo no soy partidario de gastos militares, pero si se analiza la realidad, estos gastos no son mucho mayores de los que se dieron en la etapa de Carter".
Los países europeos se encuentran ante un dilema: sincronizar sus políticas de tipos de interés a la política norteamericana y retardar la recuperación o mantener tipos básicos menos elevados a la espera de un cambio en la política de EE UU. Esto último conlleva una mayor inflación. Es un dilema difícil, según Modigliani.
La trasferencia de capitales hacia Estados Unidos y la falta de inversiones productivas puede paliarse en alguna medida creando imperfecciones de mercado, mediante la subvención de inversiones productivas privadas o la discriminación impositiva.
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