Tres personas mueren en Pakistán durante enfrentamientos entre policía y manifestantes

Dos manifestantes y un policía resultaron muertos ayer en la provincia meriodional paquistaní de Sind, donde la agitación antigubernamental prosiguió ayer por undécimo día consecutivo.Por su parte, el Partido del Pueblo Paquistaní (PPP), principal fuerza política de la oposición, lanzó ayer un llamamiento a la rebelión del pueblo contra el régimen militar del general Zia Ul Haq, que constituye una declaración de guerra, mientras se extiende en el país un clima de incertidumbre.

Un texto atribuido a la begum Bhutto, viuda del antiguo primer ministro derrocado y enviado al patíbulo por el generel Zia UI Haq hace seis años, fue distribuido el miércoles por la noche en Karachi. El documento constituye un ataque contra el régimen militar, que afronta desde el 14 de agosto una ofensiva desencadenada por la coalición de ocho partidos agrupados en el Movimiento para la Restauración de la Democracia.

La viuda de Bhutto, que preside el PPP ye stá considerada como la principal, figura de la oposición desde que su marido fuese ejecutado en la horca en 1979, pide especialmente a la población de la provincia del Punjab "que se integre en el movimiento de. redención nacional". Los habitantes de está provincia, a diferencia de los de Sind, no se han sumado todavía a la agitación desencadenada por la oposición.

La begum Rutho; residente en Europa occidental desde que fue autorizada, el pasado mes de octubre, a abandonar Pakistán, donde se encontraba bajo vigilancia domiciliaria, ha hecho un llamamiento de huelga nacional de transportes públicos, pidiendo a los opositores que salgan a la calle para hacerse detener voluntariamente, como lo han hecho más de 200 políticos en el transcurso de los 11 últimos días. Los periódicos recibieron órdenes estrictas del Gobierno de no publicar dicho llamamiento.

La presidencia del PPP exige "la dimisión inmediata.del general Zia", la celebración de elecciones en el plazo de tres meses y la liberación de todos los prisioneros políticos. Simultáneamente se ha extendido un rumor según el cual la begum proyecta regresar próximamente a Pakistán para ponerse a la cabeza del movimiento de agitación, que carece de líderes desde las detenciones masivas realizadas por el Gobierno.

Los observadores, sin embargo, consideran que el PPP, consciente de que el llamamiento entrará en la mayoría de los hogares paquistaníes a través de las eniÍsiones de la BBC en lengua urdú, se arriesga a no ser apoyado masivamente. El PPP puede confiar en que las facciones del Sind continuarán sembrando el desorden, pero no está seguro de la reacción del Punjab, donde hasta ahora sólo los obreros y los empleados han mostrado intención de enfrentarse al Gobierno.