Viven en cuevas
Recientemente, Cuevas del Campo, pueblo de 3.000 habitantes situado en la comarca de Baza, al noreste de la provincia de Granada, se segregaba de su cabecera, Zújar, para ser municipio con ayuntamiento propio. Esta situación (de ser considerado oficialmente como una calle más de Zújar) ha dado lugar a que sus vecinos sean objeto de absoluta ignorancia, tanto por parte de las autoridades locales como de las provinciales, siendo ello origen de un enorme cúmulo de carencias. De entre los problemas existentes, hay uno que sobresale del resto: el 40% de sus vecinos vive en cuevas conjuntamente con los animales, sin distinción alguna entre ambos. Estas cuevas son agujeros excavados en la roca, con una puerta de entrada, y a lo sumo disponen adicionalmente de una ventana. Una vez dentro se han hecho distintas habitaciones destinadas a cocina-comedor, dormitorios y otras para establo de mulos, etcétera. Al no existir separación real entre personas y animales, por la noche, cuando la puerta y ventana se cierran, lo que allí se respira adquiere características desagradables. ¿Cuál es el origen del problema? Aparte de no haber tenido ayuntamiento que vigile por el bienestar de sus vecinos, en este municipio predominan las pequeñas extensiones de terreno, y sus habitantes no disponen de la cantidad de dinero suficiente para construirse una modesta vivienda. /
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.