Los consejeros de la Caja Rural de Santander cesados podrían ocupar de nuevo cargos directivos

Varios ex consejeros de la Caja Rural de Santander que fueron cesados, aunque no inhabitados, hace más de dos años por el Banco de España en base a las irregularidades detectadas en la gestión de la entidad, podrían ocupar de nuevo cargos en la dirección de ésta después de la asamblea general convocada para el próximo día 22. Para presidir el consejo rector existen dos candidatos: el ex diputado de UCD, y ahora militante socialista, Ciriaco Díaz Porras, y el ex comisario de Policía y presidente del Consejo de Administración de la Sam, Valetín Hermosa.

La asamblea general de las Cooperativas Socias de la Caja Rural de Santander, que tras la investigación Ilevada a cabo por la Dirección General de Cooperativas ha quedado reducida a 18 de las 35 que inicialmente formaban parte de la entidad crediticia, se celebra en un momento en que la crisis de ésta, dos años y medio después de que fuera intervenida por el Consorcio Nacional de Cajas Rurales, se encuentra en su momento más grave.Según ha podido saber EL PAIS, el reflotamiento de la caja rural santanderina costaría al erario público una cifra del orden de 4.000 millones de pesetas, por lo que el Banco de España, de forma extraoficial, se ha manifestado partidario de su cierre, atendiendo, exclusivamente, a criterios económicos.

"El mantenimiento de la Caja Rural pasa por una decisión política en razón del interés que tiene para el mundo ganadero cántabro", puntualiza un portavoz del PSOE de Cantabria, que en ese sentido viene realizando gestiones con las autoridades económicas. "Ahora bien", matiza el portavoz socialista, "como es lógico, difícilmente podremos ayudar a esa entidad si en ella siguen mandando los que la hundieron robando descaradamente", situación que, en su opinión, se produciría si alguno de los ex consejeros de la caja resultara elegido en la asamblea general que se celebrará el próximo viernes.

Investigación a medias

Entre las 18 cooperativas consideradas con capacidad legal para participar en la asamblea -el resto, hasta un total de 35, o carecían de funcionamiento o ejercían actividades distintas de aquellas para las que fueron creadas-, se encuentran las varías presididas por los ex consejeros de la Caja Rural José Antonio de la Llama, Fermín Gómez Sena, Antonio Méndez, Gabino Aguero y Tomás Mier; este último, ex director de la entidad, preside la Cooperativa de Suministros Ganaderos de Santander (Cosuga), que antes de constituirse legalmente ya obtuvo un crédito de la entidad bancaria por importe de 100 millones de pesetas, siendo director el propio Mier, a pesar de lo cual la Dirección General de Cooperativas no ha estimado la existencia de irregularidades en la gestión; además, Mier, junto con el ex presidente de la Caja Rural, Amós Fernández, se encuentra actualmente procesado por el delito de estafa, en tanto qde otros dos presidentes de cooperativas, ya citados, De la Llama y Gómez Sena, fueron condenados el pasado año por agresiones a un miembro del comité de empresa. Todos ellos, con la excepción probablemente de Mier, que en los últímos días ha colocado al frente de Cosuga a un hombre de su confianza, participarán, por tanto, en la asamblea, pudiendo resultar elegidos al ser necesario designar de entre los representantes de las 18 cooperativas los 12 integrantes del consejo rector.Esta situación preocupa en medios cooperativos de Cantabria, que responsabilizan al Banco de España y al Ministerio de Economía de no haber llevado hasta sus últimas consecuencias la investigación, cerrada en febrero de 1981 con el cese de los consejeros, pero no con su inhabilitación, "tal como parecía lógico e irrefutable desde el punto de vista legal, al calificarse las irregularidades cometidas como graves", precisan las citadas fuentes. En el mismo sentido se manifiestan los socialistas cántabros, para los que el cambio de Gobierno tras las elecciones del 28 de octubre pasado "no ha supuesto nada en cuanto a la Caja Rural, porque", precisan, "en el Banco de España siguen los mismos de antes".

Los dos candidatos que cuentan con más posibilidades de ser elegidos presidente del Consejo Rector de la Caja Rural de Santander representan opciones claramente contrapuestas. El presidente de la Cooperativa de Comillas, Díaz Porras, ha sido, a lo largo de los dos últimos años, uno de los críticos más acerados de la gestión de la entidad, llegando a interpelar sobre el tema al Gobierno centrista en el Congreso de los Diputados.

Hermosa, por su parte, representaría la línea continuista y conservadora, por lo que, en principio, podría contar con un mayor apoyo, sí bien la decisión adoptada, como presidente de la Cooperativa Lechera Sam, de retirar las cuentas bancarias de la caja, con el consiguiente perjuicio económico para ésta, actuará en su contra. Por otra parte, la Sam es, en estos momentos, una empresa en crisis, con dificultades económicas que impiden la renegociación de un crédito oficial, lo que, en caso de no ser resuelto, llevaría a la definitiva absorción de la empresa por el INI, que ya dispone de una buena parte de las acciones.