La Administración estudia una radical modificación de las sociedades de garantía recíproca
Mayor presencia de la Administración autonómica en las sociedades de garantía recíproca (SGR); fortalecimiento de su capital social (mínimo de 5% socios y 400 millones de pesetas); concentración de las sociedades existentes; abaratamiento del coste de los avales y una profunda reforma de la Sociedad Mixta del Segundo Aval, constituyen las líneas maestras de la reforma del sistema de garantías para los pequeños y medianos empresarios que estudia en la actualidad la Administración.
El deficiente funcionamiento actual de las sociedades de garantía recíproca, que preocupa seriamente a la Administración por los riesgos de solvencia que podrían derivarse, y la necesidad de que este tipo de sociedades contribuyan con eficacia al desarrollo de las pymes fue analizado en los últimos días dentro de las Jornadas sobre Política del PSOE para las pequeñas y medianas empresas. En este contexto, el presidente de la Sociedad Mixta del Segundo Aval, Antonio Santillana, presentó una ponencia (Propuesta de reforma del sistema de afianzamiento mutuo de las pequeñas y medianas empresas) que refleja los criterios que sobre el tema está barajando en estos momentos la Administración.Según la citada ponencia, el sistema de sociedades de garantía recíproca "se ha querido implantar en España quizás de un modo precipitado, llevando a una proliferación de SGR (36 hasta el momento), con escaso capital y reducido número de partícipes, lo que puede haber estado motivado por un intento de capitalización política de la experiencia, sin medir previamente la conveniencia de la profesionalización e implantación segura, antes que el deslumbramiento de una multiplicidad de SGR a lo largo del territorio nacional".
La constitución de la Sociedad Mixta del Segundo Aval, en 1981, como sociedad anónima de capital público que utiliza el aval del Estado para reforzar la solvencia de las SGR, tampoco ha sido satisfactoria. Se ha utilizado muy poco el segundo aval por el corsé legal con que se puso en funcionamiento la citada Sociedad Mixta.
Escasa solvencia
Entre los problemas concretos de las SGR en la actualidad, según la ponencia, hay que citar el elevado coste del aval (al menos un 3% anual), que agrava aún más por vía indirecta (retenciones bancarias, riesgo de pérdida del importe depositado en el Fondo de Garantía y coste psicológico de tener que someter los proyectos a la consideración del resto de los socios de la SGR). "El elevado coste del aval puede haber conducido a una solicitud del mismo por empresarios que no disponen de crédito ante entidades privadas, ya sea por agotamiento del techo que tienen concedido o por insuficiencia de garantías. Esto hace que los clientes de las SGR, los cuales se hacen socios partícipes ante la posibilidad de disponer de aval, sean los menos solventes del mercado".El volumen de actividad de cada una de las SGR es muy reducido y sólo unas pocas, según la ponencia, se aproximan a riesgos vivos comprendidos entre 1.000 y 1.500 millones de pesetas, "lo que en cualquier caso es una cifra pequeña". También existen problemas en la dirección y control de las SGR ("un reducido número de socios partícipes, con escasa aportación de capital, controlan la SGR") y en el reafianzamiento (hay una desproporción entre el capital de Sogasa -sociedad de reaval- y los riesgos tomados). Las líneas propuestas para la reforma del sistema de garantías, en la ponencia, se ajustan a las citadas deficiencias y tratan de corregirlas. En este sentido se propone reducir el número de SGR, para hacerlas más fuertes, se fomenta la participación de las Administraciones autonómicas y locales en las SGR, se exige profesionalidad a sus directivos y mayor control de los socios protectores y se propugna aumentar los servicios a prestar. Todo ello, acompañado de un abaratamiento del aval, mayor presencia de la Administración en el primer aval, radical reforma de la Sociedad Mixta del Segundo Aval y la constitución de una Sociedad de Avales del Estado para prestar aval subsidiario, solidario, reaval y créditos a las SGR.
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